Cerro Porteño, al que el VAR no convalidó un gol legítimo por una posición adelantada inexistente del argentino Mauro Boselli, perdió en La Nueva Olla por 2-0 ante Fluminense en la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores de América.
El Ciclón mostró un nivel bajo en gran parte de la primera fracción, aunque también fue castigado por una injusticia arbitral. El resultado obliga a los azulgranas a realizar una gran presentación en el Maracaná, en siete días, para intentar seguir con vida en el certamen internacional.
EL PARTIDO. El equipo de Francisco Arce presentó novedades muy importantes en su formación inicial en la que resaltó el debut de su refuerzo internacional para el presente curso, el colombiano Rafael Carrascal en reemplazo de Ángel Cardozo Lucena, quien llegó lesionado de la Albirroja.
Chiqui también se vio obligado a remendar el bloque defensivo para este compromiso. En el centro, el juvenil Rodrigo Delvalle cubrió el hueco dejado por Juan Patiño, suspendido, mientras que Alan Rodríguez ocupó la banda izquierda en sustitución del transferido Santiago Arzamendia.
En el juego, el elenco paraguayo se mostró inconexo y debió apoyarse en Jean para atravesar indemne momentos muy oscuros. El portero brasileño tuvo que ensuciarse muy temprano la ropa para repeler los remates de Nené y de Yago Felipe a los 6 y 9 minutos, respectivamente.
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A estas acciones se debe sumar un cabezazo desviado de Abel Hernández, su referente de área ante la ausencia de Fred (11 m). El mismo delantero estuvo de cara con el gol, pero volvió a estrellarse con el manotazo del arquero azulgrana (25 m).
Fluminense fue dueño del control absoluto por media hora. En este tiempo, Nené puso por segunda vez en jaque la igualdad con un exquisito tiro libre que impactó en el palo (25 m).
No obstante, Cerro Porteño despertó en los últimos 15 minutos y se puso a la altura de su rival cuando intervinieron Mateus Gonçalves, Claudio Aquino y Alberto Espínola. También acarició el tanto con Robert Morales y luego con Mauro Boselli, a los 32 y 34 minutos, con chances claras.
Antes del descanso, el goleador argentino venció incluso la resistencia de Marcos Felipe, pero la conquista no subió al marcador por un offside detectado por el VAR, cuyos componentes no tuvieron en cuenta la ubicación Samuel Xavier, que habilitaba al jugador azulgrana.
En el complemento, a escasos tres minutos, el conjunto carioca castigó al Ciclón por intermedio de uno de los mejores hombres del lance, Nené, que ganó el duelo a Jean en la tercera oportunidad.
Cerro Porteño pudo emparejar los números con Alberto Espínola, quien se hizo con un balón suelto, pero su remate fue muy alto (53 m). Fue poco antes de producirse en el segundo golpazo protagonizado por Egidio, quien aumentó la cuenta con una definición sin contemplaciones (60 m).
Con la desventaja desmesurada, Chiqui metió cambios y enfrentó el último tramo del partido con entusiasmo, aunque sin tener efectividad. En esta fracción, el árbitro argentino Facundo Tello fue requerido por el VAR para analizar una mano, que decidió no cobrarla con la que incrementó el descontento azulgrana.
