El último jugador proveniente del fútbol paraguayo que ha militado en el Valencia CF ha sido el atacante Nelson Haedo Valdez, en la campaña 2012-2013.
Sin embargo, el futbolista paraguayo de mayor prestigio que ha jugado en el club valenciano ha sido Carlos “Lobo” Diarte, atacante que hace más de tres décadas dejó su impronta entre la afición valencianista.
Diarte fue campeón con el Valencia, al igual que sus compatriotas Anastasio Jara y Aníbal Pérez, todos ellos integrantes de la lista de once futbolistas guaraníes que han pasado por el club valenciano.
La historia dio comienzo con la llegada de José Raúl Aveiro en 1958, quien en tres años en el Valencia marcó diecinueve goles. Procedía del Sportivo Luqueño de su país y en 1961 salió en dirección al Elche español, mientras que Carlos Sanabria pasó de forma efímera por Mestalla con un solo gol en la campaña 59-60.
El primer paraguayo que dejó huella fue Anastasio Jara, que se proclamó campeón de Copa en 1967, en una competición en la que marcó un tanto en la final ganada ante el Athletic Club (2-1).
Llegó del Córdoba en 1966 y salió cinco años después (aunque a mitad de su estancia en Valencia volvió como cedido un año al club andaluz). Era un extremo hábil que se marchó al Sabadell tras haber logrado once tantos en su estancia en Mestalla.
El futbolista paraguayo que más ha rendido en el Valencia ha sido el central Aníbal Pérez, no solo porque pasó siete temporadas (1968-1975) en el equipo, sino porque fue campeón de Liga en 1971 en una campaña en la que disputó los treinta encuentros del campeonato.
Se trataba de un central rocoso y contundente, que tenía un buen disparo y marcó algunos goles de falta y de larga distancia. Internacional por su país, jugó 155 partidos con el uniforme blanco del Valencia en los que anotó seis tantos.
Completamente diferente fue el rendimiento de Óscar Lleida y Juan Ramón Ocampos a quien prácticamente nadie recuerda tras su efímero pasó por el Valencia de los años setenta, antes de la contratación de Diarte en 1976.
El atacante guaraní llegó procedente del Zaragoza en el que fue el traspaso más importante hasta aquel momento en el fútbol español. En sus inicios se mostró arrollador, pero fue de más a menos, hasta el punto de que en sus tres temporadas en Valencia marcó un total de veintitrés goles, de los que diecisiete subieron al marcador en su primera campaña, la 76-77.
Se marchó al Salamanca y luego jugó en el Betis, Saint Etienne (Francia) y el Olimpia de Asunción en el que se había formado. Al concluir su carrera se instaló en Valencia donde falleció hace diez años.
También jugó en Mestalla al mismo tiempo que Diarte el centrocampista Eufemio Cabral, internacional y que estuvo dos años en el club valenciano, en una época en que el atacante Orlando Giménez también jugó dos años en el Valencia.
Tras el paso anecdótico de Raúl Amarilla, en la campaña 2012-2013 vistió la camiseta del conjunto valencianista Nelson Haedo Valdez. Procedía del Rubin Kazan ruso y que salió al final de la campaña en dirección a los Emiratos Árabes Unidos.
Durante aquella temporada, el atacante internacional con la camiseta albirroja marcó nueve tantos y se convirtió en el último precedente a la llegada de Alderete, puesto que en los últimos años no han jugado futbolistas paraguayos en el equipo valenciano.