Luis Abreu se metió en la historia de los superclásicos al convertir el gol de la victoria de Olimpia sobre Cerro Porteño, en el ueno La Nueva Olla. El chico de 21 años ya presagiaba este momento ya que a su familia le hizo una promesa.
En charla con el programa Fútbol a lo Grande, su padre Carmelo, comentó: “Es algo indescriptible, impresionante. Durante toda la semana Luis nos decía que si jugaba iba a hacer un gol”. Y cumplió. El futbolista ingresó a los 69’ y sacudió las redes cuando se jugaba el segundo minuto de adición.
La familia no pudo estar
Don Carmelo Abreu señaló que lamentablemente no pudieron presenciar desde el estadio el gol de su hijo. “Su mamá se fracturó la pierna un día antes del clásico y no pudimos ir a la cancha”.
De igual manera el tanto de su hijo les “dio una alegría tremenda”. Desde muy pequeño “siempre se peleaba con su mamá. Le decía que iba a irse a Asunción a practicar fútbol”. Y cuando tenía 13 años “fue evaluado por el profesor Luis Monzón y tuvo la posibilidad de ir a Olimpia”.
Perseverancia a pesar de la distancia
Luis Abreu y su familia son de San Pedro. Su padre mencionó que el futbolista es “es muy persistente, muy metódico. Eso a nosotros siempre nos dio mucha fuerza. Lo tomamos como un desafío grande”.
A pesar de llegar muy joven a la Capital del país, “él nunca pidió venir a San Pedro. Nunca quiso dejar su sueño”. El del sábado fue el primer tanto de Luis Abreu en la Primera División y como todo paraguayo, su sueño apunta a vestir la camiseta de la Albirroja.