El técnico del cuadro ‘rossoneri’ necesitaba dar un giro de 180 grados a su equipo, errático en las últimas tres jornadas en las que sumó una victoria (3-0 frente al Monza), un empate (2-2 ante el Salernitana) y una derrota (3-2 contra el Atalanta). Apenas acumuló un botín de cuatro puntos de nueve posible con casi tres pinchazos consecutivos que mermaron sus opciones de pelear por el título, ahora prácticamente cosa de dos (Inter y Juventus). El Milan, a trece puntos del líder, aspiraba a terminar 2023 a una decena del Inter.
El Sassuolo, con Belardi como principal amenaza (nueve tantos esta temporada en la Serie A), tampoco atravesaba su mejor momento. Al borde del descenso después de encandenar cuatro partidos sin ganar (tres derrotas y un empate), no estaba para tirar cohetes. Sin embargo, lució bien en San Siro. Firmó un encuentro serio, sobre todo la primera parte, en la que sujetó bien al Milan, dominador pero incapaz de morder para conseguir algún botín.
De hecho, las estadísticas, pese al aparente dominio ‘rossoneri’, dejaban en buen lugar al Sassuolo: tres disparos a portería contra uno del Milan, de Rafael Leao y que acabó en gol anulado por fuera de juego previo. Como no, fue Belardi quien más incomodó a los hombres de Pioli, sobre todo con un disparo desde fuera del área que obligó a Maignan a volar para despejar la pelota a córner.
Atascados ambos equipos en los últimos metros, en la segunda parte no hubo revolución alguna. Tressoldi sustituyó en el centro de la defensa del Sassuolo a Erlic, que tenía algún problema físico. Pioli pudo apostar por devolver a Theo Hernández a su posición natural, pero dejó las cosas como estaban al principio. De inició, apostó por colocar al lateral francés en el centro de la defensa. La banda izquierda perdió profundidad, verticalidad y algo de espectáculo. Sin embargo, Pioli no cambió de opinión.
Sin agitadores para romper el parsimonioso ritmo que rodeaba al encuentro, sólo quedaba encomendarse a una jugada aislada. Un arranque de algún rebelde, una jugada a balón parado o algún error habría sido suficiente para romper el partido. Y ese instante llegó con un buen pase filtrado entre líneas de Bennacer que acabó en los pies de Pulisic. El jugador estadounidense no falló en el mano a mano ante Consigli y, a falta de media hora para el final, el Milan se puso por delante en el marcador.
El tanto bastó al Milan. No necesitó más. Su pequeño arranque duró unos instantes. No tardó en regresar a su ritmo tedioso y el Sassuolo dio un paso adelante insuficiente. Sólo Laurienté, con un disparo raso complicado desde fuera del área que pasó entre las piernas de Theo Hernández, pudo empatar. Maignan detuvo su intento y no hubo más. Una buena asistencia de Bennacer y el acierto de Pulisic fueron suficientes. El Milan acabará 2023 tercero de la Serie A a diez puntos del Inter tras firmar una victoria gris pero reparadora.
-- Ficha técnica:
1.- Milan: Maignan; Calabria, Kjaer (Simic, min. 82), Theo Hernández, Florenzi; Reijnders, Bennacer (Adli, min. 63), Loftus-Cheek (Zeroli, min. 74) ; Pulisic, Giroud (Jovic, min. 63) y Leao (Samu Chukwueze, min. 81).
0.- Sassuolo: Consigli; Pedersen, Erlic (Tressoldi, min. 46), Ferrari, Toljan; Matheus Henrique, Thorstvedt (Ceide, min. 89); Berardi (Samu Castillejo, min. 70), Bajrami (Volpato, min. 65), Laurienté (Mulattieri, min. 89) y Pinamonti.
Goles: 1-0, min. 59: Pulisic.
Árbitro: Livio Marinelli. Mostró cartulina amarilla a Samu Castillejo (min. 88) por parte del Sassuolo.
Incidencias: partido correspondiente a la decimoctava jornada de la Serie A disputado en el estadio de San Siro ante cerca de 65.000 espectadores. EFE