El único gol del partido llegó a los 94 minutos por medio del nigeriano Zaidu, suficiente para garantizar el título de campeón para el Porto, que necesitaba al menos un empate para celebrar en casa de su principal adversario.
En un duelo de pocas oportunidades para ambos equipos, el Benfica fue superior en la segunda parte y llegó a amenazar con amargar la fiesta de Oporto con un gol del uruguayo Darwin Núñez, en el minuto 51, que acabaría por ser anulado por el VAR por fuera de juego.
Los nuevos campeones de Portugal consiguieron aguantar la presión y la velocidad de las "águilas”, que, a pesar de estar mejor en el campo, no llegaron a crear mucho peligro para el contrario.
A una jornada del final de la temporada, el Oporto conquista el título con 88 puntos, nueve más que el Sporting, segundo y con un partido menos pero ya sin posibilidad y de alcanzar al equipo de Sérgio Conceição.
