En cancha del Independiente de Campo Grande, el Rojo de Palomar puso al borde de la cornisa al Chanchón, pero éste reaccionó a tiempo y evitó lo que pudo ser una verdadera sorpresa.
En partido correspondiente a la segunda fase de la Copa Paraguay, con goles de Fredy “El Zorro” Bareiro (2') y Alexis Rojas (43'), Luqueño fue a vestuarios con una sonrisa en el rostro.
Por entonces todo iba 2-1 en el marcador, puesto que Ariel Estigarribia había anotado el empate parcial para Fernando (19'), dejando la puerta abierta para que en la complementaria las cosas se complicaran hasta de forma inesperada para “los profesionales”.
Primero porque Álvaro Campuzano volvería a igualar la cita a los 55', y porque el fernandino Néstor Cubilla pondría un 2-3 que desparramaría la estantería del conjunto dirigido por Javier Sanguinetti.
Momento en que Blas Armoa tuvo que erigirse como conductor de un equipo que caía ante uno de los favoritos de la División Intermedia (el sábado disputará su ascenso o no ante el Sportivo San Lorenzo), mostrando el camino que determinaría el 3-3, 4-3, y 5-3 final. En consecuencias, definidos todos los clasificados, el próximo rival de Luqueño saldrá de un sorteo.