Cerro Porteño se acomodó en la tarde de este martes en Buenos Aires, a la espera del desquite contra Estudiantes de La Plata, por la vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores.
El cuadro paraguayo, que cuenta con el regreso del mediocampista Robert Piris Da Motta, que no pudo jugar el primero por suspensión, deberá ganar por al menos 1-0 al conjunto argentino para poder igualar la serie y forzar los penales en la búsqueda de avanzar a los cuartos de final de la competencia continental.
El equipo azulgrana buscará hacer pesar su momento, ya que atraviesa un gran presente en el torneo paraguayo, donde figura como único invicto del Clausura, con 20 puntos en ocho jornadas y con cuatro de ventaja sobre su inmediato perseguidor, Guaraní.
El Ciclón derrotó justamente a su escolta en un partido electrizante el último sábado, cuando lo venció como visitante por 3-4. Al respecto, Diego Martínez destacó el envión anímico que supone el triunfo frente al Aborigen para su plantel de cara al enfrentamientocon Estudiantes.
Se trata del cuarto partido en el historial entre ambos equipos por Copa Libertadores, tras el encuentro de ida de esta serie de 2025 y los octavos de final de 2011, cuando tras un doble empate 0-0 el conjunto paraguayo clasificó por penales.
El ganador de esta llave chocará en la próxima fase con el vencedor del choque entre los brasileños Flamengo e Internacional, que disputan este miércoles el duelo de vuelta tras el triunfo por 1-0 del ‘Mengao’ en la ida.