“Sabemos y asumimos la responsabilidad del fútbol en la lucha contra la expansión del COVID-19 en Brasil”, afirmó el presidente de la CBF, Rogério Caboclo, en un comunicado.
De momento, están suspendidos todos los partidos previstos en los campeonatos que ya están en marcha en el país, que son la Copa de Brasil, los Campeonatos Brasileños Femeninos A1 y A2, el Campeonato Brasileño Sub'17 y la Copa de Brasil Sub'20.
Según la CBF, respecto a los campeonatos regionales, como el Paulista o el Carioca, cada entidad organizadora deberá tomar una decisión y la “autonomía local” será “respetada”.
La CBF no informó de una fecha para que las competiciones se reanuden, pero indicó que “seguirá en permanente contacto con el Ministerio de Salud” para que todo vuelva a la normalidad “cuanto antes”.
“Unimos esfuerzos para que el país y el deporte superen el gran desafío con respecto a la pandemia y esperamos que, cuanto antes, podamos volver a la normalidad”, destacó la CBF.
De acuerdo al último boletín divulgado este domingo por el Ministerio de Salud, Brasil tiene 176 casos confirmados de COVID-19 e investiga otros 1.915 sospechosos, aunque ninguna muerte a raíz de la enfermedad ha sido registrada hasta el momento en el país.
El estado de Sao Paulo, el más poblado de Brasil, concentra un 63,6 % del total de casos confirmados, lo que se traduce en 112 personas contaminadas por el COVID-19.
Río de Janeiro, con 24 diagnósticos positivos, y el Distrito Federal, con ocho, ocupan la segunda y tercera posiciones, respectivamente.
A partir de este lunes, al menos 11 de los 27 estados brasileños pondrán en marcha restricciones a la población en un intento de frenar la expansión del coronavirus, que incluyen la suspensión de eventos masivos en casi todo el país y de las clases en colegios y universidades en algunos casos.
Pese a las alertas y recomendaciones de las autoridades y de la comunidad médica, miles de personas salieron a las calles este domingo en todo el país en manifestaciones a favor del presidente Jair Bolsonaro, quien llegó a participar en uno de los actos y saludó, abrazó y se hizo fotos con simpatizantes.
Hace unos días, el presidente brasileño fue sometido a pruebas del coronavirus después de que al menos seis personas de su entorno próximo dieran positivo tras un viaje a Estados Unidos, pero, según Bolsonaro, sus análisis dieron negativo.