Los hombres de Jürgen Klopp, después de salvar su compromiso en la Liga de Campeones ante el Salzburgo y pasar como primeros de grupo a octavos, siguieron con su condición e invictos en el campeonato doméstico y se deshicieron del colista con más problemas de los esperados.
Después de 39 minutos complicados en los que el Liverpool no tiró a puerta, Mohamed Salah adelantó a los suyos al aprovechar una buena combinación con Roberto Firmino y Sadio Mané.
El egipcio definió con una curva perfecta con la pierna derecha, su segundo tanto consecutivo con su “pie malo”, después de la diana imposible que hizo ante el Salzburgo sin prácticamente ángulo.
A partir de ahí, el Watford dispuso de varias ocasiones para empatar, sobre todo en los pies de Ismaila Sarr, alguna de ellas hizo a Gerard Deulofeu llevarse las manos a la cabeza de la incredulidad del fallo.
En la segunda parte el guion no varió demasiado y, aunque Mané de cabeza a pase de Xherdan Shaqiri consiguió poner el segundo, el VAR decretó que había fuera de juego por escasos centímetros y evitó que el conjunto del recién renovado Jürgen Klopp cerrase con más tranquilidad el encuentro hasta el descuento, cuando Salah, con un toque de tacón, sentenció con su noveno gol en la liga.
Liverpool se asienta en el liderato de la Premier League con 49 puntos, nueve más que el Leicester City y diecisiete más que el Manchester City, aunque estos dos equipos aún tienen que disputar sus encuentros de esta jornada.