El jugador de los ‘Spurs’, sobresaliente cada temporada en la Premier, dio un vuelco al partido y llevó al conjunto que dirige el alemán Jurgen Klinsmann al momento clave por el título de una competición que Corea del Sur ha ganado en dos ocasiones y de la que fue finalista en otras cuatro.
Son provocó el penalti que evitó, en el tiempo añadido, la eliminación coreana y después, en la prórroga, marcó el gol del triunfo.
Ya ha superado Corea su resultado de la pasada edición, cuando se estancó en los cuartos de final. Dio un paso más en el estadio Al Janoub de Al Wakrah, donde tuvo que remontar la ventaja australiana, obtenida al borde del descanso, en el minuto 42, por medio de Craig Goodwin a pase de Nathaniel Atkinson.
Al borde del adiós, la selección de Klinsman se salvó gracias a Son. En el minuto 96, a punto de finalizar el partido, el jugador del Tottenham fue trabado por Lewis Miller en el área. Ejecutó el tiro desde los once metros Hwang Hee Chan, que estableció el empate y llevó el choque a la prórroga.
Y en el minuto 104, un tiro libre directo lanzado perfectamente por Son culminó la remontada del combinado oriental.
Australia, que volvió a quedarse en cuartos como en la edición de 2019, jugó la segunda parte del tiempo extra con diez jugadores por la expulsión de Aiden O`Neill.
Corea del Sur se enfrentará en semifinales con Jordania, que, gracias a un autogol de Vahdat Hanonov se impuso a Tayikistán en el estadio Ahmad bin Ali de Al Rayyan y por primera vez en su historia alcanzó las semifinales de la Copa de Asia.
El conjunto del marroquí Ihoussaine Ammouta nunca había superado los cuartos de final, que alcanzó en 2004 y 2011, en las cuatro ediciones anteriores que disputó este torneo.
En esta ocasión, tras superar en octavos a Irak y ahora a Tayikistán, se asegura un lugar entre los cuatro mejores de la Copa de Asia, su mejor papel. EFE