“No hay duda ninguna y se trata de algo necesario en la situación actual”, dijo Hordorff al canal de pago sky.
El torneo debía empezar el 29 de junio y Hordorff no cree posible un aplazamiento.
“Por el césped y la luz Wimbledon; tiene sus propias leyes”, explicó.Estas circunstancias, según Hordorff, hacen impensable que el torneo se pueda realizar en septiembre u octubre, más cuando la gira de tierra está suspendida, y Roland Garros ha trasladado sus fechas del 20 de septiembre al 4 de octubre.
Las consecuencias económicas, según el funcionario alemán, se ven mitigadas gracias a que se trata del único torneo del Gran Slam que tiene un seguro contra una pandemia universal.