“Eres un gitano”, entonó la Curva Norte del Gewiss Stadium este domingo en Bérgamo (norte) en el descuento del choque entre Juventus y Atalanta. Un partido que el colegiado paró durante casi un minuto para lanzar un mensaje por megafonía para que cedieran los cánticos, sin éxito.
El ariete respondió a su manera, con un tanto en el último suspiro que dedicó a la grada incluso cuando compañeros y el propio árbitro intentaron evitar el enfrentamiento.
El colegiado acabó mostrándole una tarjeta amarilla que, teniendo en cuenta el reciente precedente del caso del belga Romelu Lukaku -indultado por el presidente de la Federación italiana-, se espera que se le retire.
Gian Piero Gasperini, técnico del Atalanta, quiso quitarle hierro al asunto y dijo que no fueron cánticos racistas porque solo fueron dirigidos a una persona.
“El racismo es muy grave y hay que combatirlo, pero en este caso es más bien una mala educación. Se dirigen a un individuo. El racismo es algo más serio. Si se habla de racismo se está sacando de contexto completamente. Tenemos a Pasalic y Djmsiti, y en el pasado Ilicic: a ellos también habría que haberles coreado. Condeno cualquier gesto de mala educación”, dijo nada más finalizar el encuentro.
En cambio, Massimiliano Allegri, entrenador del Juventus, fue mucho más duro y condenó seriamente los actos.
“Desgraciadamente, estos hechos que suceden hay que combatirlos: hay que ser bueno para fingir que no ha pasado nada, ya sea blanco, negro o amarillo”, aseguró Allegri. “Dejemos que los responsables juzguen y tomen medidas”,sentenció el técnico. EFE