El Benfica empezó este lunes de la peor manera posible su defensa del título portugués, al caer por 3-2 en Porto ante el Boavista, que acabó ganando gracias a un gol al bajar el telón y tras una segunda parte frenética.
Cuatro goles y dos expulsiones en los últimos 45 minutos marcaron el cierre de la primera jornada de la liga portuguesa, en la que el Benfica no logró imponerse pese a una brillante actuación de Rafa.
El extremo portugués fue el mejor de las "águilas” y asistió a Ángel Di María en el primer gol de su equipo con una soberbia acción individual.
Cuando el reloj se acercaba a los 22 minutos, corrió por la banda izquierda como una flecha y dejó atrás tanto a los defensas como al portero del Boavista, asistiendo después para “El Fideo”, que sólo tuvo que empujar el balón dentro de una portería completamente a su merced.
Con su gol, Di María volvió a inscribir su nombre en la lista de goleadores después de haber marcado en la victoria de la Supercopa contra el Porto (2-0).
El curso del partido cambió en el minuto 50 con la roja directa al delantero croata Petar Musa, que resbaló tras pisar el balón, lo que provocó una dura entrada en la pierna del uruguayo Rodrigo Abascal, que posteriormente tuvo que ser sustituido.
Reducido a diez hombres, el entrenador del Benfica, Roger Schmidt, optó por dar entrada al central Morato y retiró a Di María, que abandonó el campo visiblemente molesto e incluso recibió una amarilla por tardar demasiado en abandonar el terreno de juego.
Los “ajedrezados” lograron el empate nada más reanudarse el partido, en el minuto 55, por mediación del eslovaco Bozeník, que aprovechó un mal recorte del argentino Nicolás Otamendi para igualar la contienda.
A pesar de jugar con uno menos, el Benfica siguió buscando el gol y volvió a adelantarse en el minuto 75 gracias a Rafa, que cabeceó para hacer el 2-1 tras una jugada caótica con una buena parada del portero rival y un balón al larguero.
Cuando el partido se acercaba a su fin y parecía que los tres puntos se irían a Lisboa, el Boavista empató mediante un penalti transformado por Bruno Lourenço en el 90'.
El propio Lourenço fue expulsado en el minuto 90+11, lo que supuso la sexta expulsión en la primera ronda de la temporada de la liga portuguesa, que vio una roja en cada uno de los encuentros del domingo y el lunes.
Dos minutos después, un gigantesco baldazo de agua fría para el Benfica, que vio cómo Bozeník se escapaba hacia la portería defendida por Vlachodimos, que no pudo evitar el 3-2 definitivo.
EL PORTO Y EL SPORTING COMIENZAN CON VICTORIAS
Ese mismo lunes, el Porto derrotó al Moreirense por 1-2 en un difícil duelo en el que el español Toni Martínez fue protagonista al marcar el gol que permitió a los “dragones” montar la remontada.
A su vez, el viernes, el Sporting de Portugal también comenzó el campeonato con una trabajada victoria, al imponerse al Vizela por 3-2, con un gol en el último segundo.
Mientras, el sábado, el Braga cayó por 1-2 en casa ante el Famalicão, tras un tanto del español Óscar Aranda, excanterano del Real Madrid, en el minuto 95. EFE
