“El Estadio Monumental Banco del Pichincha, conocido también como Estadio de Barcelona, se encuentra habilitado para encuentros deportivos de cualquier índole”, reza una nueva decisión del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) municipal que sólo agrega incertidumbre sobre si se celebrará o no el encuentro.
Y aclara que la resolución se toma “luego de la deliberación con las autoridades competentes” y “en alcance a la resolución previa expedida el día de hoy”.
El mismo documento traslada al “ente rector de Salud del país” la necesidad de “pronunciarse” sobre “el protocolo a seguir ante los hechos suscitados de casos confirmados de COVID-19 en un grupo de jugadores y cuerpo técnico del Club Flamengo”.
Poco antes de comunicar esa decisión, la alcaldesa Cynthia Viteri había comunicado por redes que “el estadio Monumental no está inhabilitado” y que estaba a “la espera del pronunciamiento del ministro de Salud, en función de establecer si se da o no el partido de hoy”.
La aclaración la publicó poco después de que en una rueda de prensa el responsable del Salud del Municipio, Carlos Salvador, informara de que el escenario estaba “inhabilitado temporalmente” y presentara a cámara un documento del mismo COE municipal firmado por Viteri.
El Comité de Operaciones de Emergencia Nacional (COE), tras ser consultado luego de la rueda de prensa, aseguró por su parte que “en el protocolo aprobado para la disputa de Copa Libertadores no se establece suspender algún partido y que eso se respetará".
Mientras que fuentes de la Conmebol en Guayaquil señalaron a periodistas locales que “para ellos nunca estuvo suspendido el partido”, corroborando la declaración del COE nacional.
La incertidumbre en torno al estadio, horas antes del partido entre ambos equipos, se registró a raíz de que “un grupo de jugadores del Flamengo diera positivo” a pruebas de COVID-19, según escribió la propio alcaldesa por redes sociales antes de enviar a un equipo médico a revisar la situación en el hotel donde está concentrado el club brasileño.
Según el reporte municipal, eran “siete los casos de jugadores” contagiados.
Por el momento, la Conmebol no se ha pronunciado oficialmente sobre la suspensión o no del partido.
El enfrentamiento entre Barcelona y Flamengo corresponde a la cuarta jornada del Grupo A de Copa Libertadores.