“Querido Diego, nos dejas una muestra de lo que es un hombre con toda su fragilidad, su fuerza, su amor total por la vida y por las personas. Un campeón único e irrepetible. Tus debilidades, tus manchas, tus errores son iguales a tu inmensa grandeza y se anulan para formar a un mito”, escribió De Laurentiis en una carta publicada por el Nápoles en su página web.
“Creo que es correcto llamar al San Paolo con tu nombre, para que sigas con nosotros como demostración del camino de excelencia que este equipo ha tomado”, añadió el máxima mandatario del Nápoles.
La propuesta fue lanzada este miércoles por el alcalde de la ciudad sureña, Luigi De Magistris, y De Laurentiis la aceptó de forma inmediata, manifestando su voluntad de adelantar los trámites burocráticos para el cambio de nombre se pueda producir lo antes posible.
En su carta, De Laurentiis consideró que Diego fue “un pintor del balón”, cuyas “pinceladas merecen ser guardadas en el museo Louvre”.
“Tus años en Nápoles son indelebles en la memoria de los napolitanos. Símbolo de un deseo de revancha y de una anhelada resurrección. Gracias Diego, estás y te quedarás con todos nosotros”, agregó, firmando la carta abierta.
El mensaje del presidente De Laurentiis, que relanzó al Nápoles al comienzo de los años 2000 y le llevó hacia la elite de la Liga de Campeones en las últimas campañas, se produce después del fallecimiento de Maradona, este miércoles en su vivienda de Buenos Aires por un paro cardíaco.
La ciudad de Nápoles, en la que Maradona ganó dos títulos ligueros y una Copa UEFA entre 1984 y 1991, está dedicando a su “D10S” una larga serie de sentidos homenajes, tanto en la zona del estadio San Paolo como en los “Quartieri Spagnoli” (Barrio de los españoles).
Ya a partir de la tarde italiana de este miércoles, los aficionados napolitanos colocaron velas, fotos, camisetas, bufandas y pancartas para recordar a su símbolo eterno.
Cientos de hinchas siguen reunidos en las afueras del San Paolo para recordar a Diego, a la espera de que el Nápoles juegue este jueves en la Liga Europa contra el Rijeka.