“Paolo sabe el apoyo que tiene del grupo, de mi persona y todo el cuerpo técnico. Sabemos lo profesional que es”, indicó Cueva en declaraciones al canal América Televisión.
El jugador del Sao Paulo brasileño alegó “los años que Guerrero lleva jugando fuera de Perú en un nivel competitivo” para descartar que el delantero del Flamengo brasileño pudiera haber hecho “algo errado”.
“Es el capitán de la selección, al cual muchos de nosotros admiramos. Es único en nuestro país y en el fútbol mundial”, anotó Cueva.
La suspensión temporal fue prorrogada esta semana por veinte días más, por lo que Guerrero permanecerá inhabilitado para jugar y entrenar hasta el 24 de diciembre, lo que le hará perderse la final de la Copa Sudamericana ante el Independiente de Avellaneda argentino. En ese plazo está previsto que la FIFA publique su decisión sobre la investigación realizada al jugador tras haber dado positivo por dopaje en el partido de las eliminatorias mundialistas jugado frente a Argentina el 5 de octubre.
La sustancia encontrada en los análisis practicados a Guerrero es la benzoilecgonina, principal metabolito de la coca, que supuestamente se originó por haber bebido un té contaminado con hojas de coca y no por haber consumido cocaína, como sostuvo la defensa del jugador en una audiencia celebrada el 30 de noviembre en Zúrich.
Si la FIFA impone a Guerrero una sanción mayor a siete meses, el atacante se quedará sin jugar la primera mitad del año 2018 con el Flamengo y tampoco llegaría a tiempo para jugar con la selección peruana el Mundial. EFE
