Ya desde el inicio el partido se vería marcado por esas cosas que pocas veces pasan el fútbol, puesto que apenas a los 3' de arrancado el encuentro, a raíz de una sanguinaria entrada sobre Víctor Cáceres, el mediocampista nacionalizado español Felipe Melo se iría expulsado del lance.
En la ocasión el argentino Germán Delfino mostró primero la amarilla, pero al percatarse de la gravedad de la lesión de “el Topo”, el árbitro optaría por modificar el color del cartón exhibido. Con absoluta justicia, el Ciclón quedaría con un hombre más sobre el campo y a partir de ahí propondría un juego basado en la posesión del balón, obligando al rival a esperar atrás y salir de contra.
Sin embargo no supo sacar mayores provecho de ello, y el primer remate franco al arco de Weverton llegaría a los 17', cuando Juan Escobar probaría la resistencia del golero rival con un fuerte tiro desde fuera del área. Posteriormente, sobre los 30', Palmeiras respondería rápido entre el colombiano Borja y Willian, llamando a la primera gran intervención de Antony Silva.
Para variar, con tres volantes de contención, una estrategia preparada para un hipotético 11-11, Cerro abusaría de los pases intrascendentes, salvo cuando el visiblemente golpeado Topo se animó a romper líneas, habilitando de manera magistral a Óscar Ruíz, quien falló en el puntazo final (35').
Casi sobre los 39' Diego Churín también tendría su oportunidad de marcar, pero pese a lograr conectar un buen centro enviado por Santiago Arzamendia, no lograría darle suficiente fuerza y dirección a su remate de cabeza, dejando todo para la complementaria.
Posteriormente, en el arranque del segundo tiempo, Fernando Jubero mandaría del banco al ataque a Nelson Haedo Valdez por Víctor Cáceres, modificando con ello el esquema táctico inicial que, además, pronto sufriría de una variante obligada debido a que un accidental golpe de cabezas mandaría a Rodrigo Rojas a abandonar el Allianz Parque en ambulancia.
El entrenador europeo entonces pondría sus cartas en el uruguayo Hernán Novick, quien no desentonaría y sería el encargado de tomar los hilos del conjunto azulgrana posterior al gol que encendería la ilusión de los paraguayos, obra del lateral Santiago Arzamendia.
Corría el minuto 56 cuando Arzamendia se jugó la personal y volvió a intentar con un centro a la zona de peligro, que esta vez más que centro sería un verdadero sablazo al ángulo superior izquierdo de Weverton.
Con ello, Jorge “Conejo” Benítez sería la última variante azulgrana para formar un bloque completamente ofensivo junto a Churín, Haedo y Ruíz. Este último protagonizaría tres claras ocasiones como para lograr desnivelar las cosas, sin embargo, en la noche del jueves, la fortuna no estuvo de su lado.
Antes del final, la cita cayó en un espeso terreno plagado de tarjetas amarillas y de un expulsado más del lado local, Deyverson Silva, por incitar a la violencia, dejando a su equipo con 9, situación que tampoco alcanzó para Cerro. La serie queda para el Palmeiras que ahora se verá las caras con el Colo Colo de Lucas Barrios, equipo que llega de eliminar a otro gigante del mismo país: el Corinthians.