Han pasado 596 días desde la última conquista de Zinedine Zidane, el segundo técnico con más títulos en la historia del Real Madrid, que busca en la Supercopa de España su décimo título, vencedor de todas las finales que ha disputado, en búsqueda de la estela de Miguel Muñoz, último entrenador que le queda por superar con catorce trofeos.
El 26 de mayo de 2018 llegó la última conquista de Zidane. En Kiev, ante el Liverpool, haciendo historia como primer técnico en ganar tres ediciones consecutivas de la Liga de Campeones.
El entrenador que más rápido llenó sus vitrinas de éxitos en el Real Madrid. Sus tres ‘Champions’ (2015/16, 2016/17 y 2017/18), una Liga (2016/17), dos Supercopas de Europa (2016 y 2017), dos Mundiales de Clubes (2016 y 2017) y una Supercopa de España (2017).
Decidió marcharse tras firmar nueve títulos de trece posibles y superar leyendas del banquillo madridista como Luis Molowny o Vicente del Bosque, por detrás únicamente de Miguel Muñoz. Con un récord de encuentros invicto que alcanzó los 40 partidos en todas las competiciones, entre abril de 2016 y enero de 2017, la racha más larga de un entrenador blanco.
En las finales nunca falló Zidane. Un promedio de 2,55 goles entre las ocho disputadas. Se estrenó en la final de la Liga de Campeones de 2016, derrotando en la tanda de penaltis al Atlético de Madrid del ‘Cholo’ Simeone tras el 1-1 en Milán. La Supercopa de Europa ante el Sevilla (3-2) y el Mundial de Clubes frente al Kashima (4-2), iniciaban el camino de éxito del técnico francés en el Real Madrid. Tres títulos en seis meses.
La Liga de Campeones con exhibición ante el Juventus en Gales (1-4), la Supercopa de Europa ante el Manchester United que dirigía José Mourinho (2-1), la de España derrotando a doble partido al Barcelona (1-3 en el Camp Nou y 2-0 en el Santiago Bernabéu) y un nuevo Mundial de Clubes, frente a Gremio (1-0). Zidane firmaba siete entorchados en dos años y medio pero sintió que su mensaje se había agotado en el vestuario. El triunfo ante el Liverpool era un punto y aparte.
Porque el francés sintió parte de responsabilidad a los meses de irse cuando vio que el proyecto heredado por Julen Lopetegui no funcionaba y que tocaba fondo con Santi Solari. Desde su regreso se centró en la reconstrucción de un equipo hundido y casi diez meses después de su regreso y un año, siete meses y catorce días después del último éxito, tiene en su mano volver a conquistar un título.
Es la oportunidad de encontrar el premio a su trabajo, al mando de un equipo que lleva catorce partidos sin perder y que exhibe su mejor fútbol por encima de los nombres. Con las bajas de jugadores tan importantes como Eden Hazard, Gareth Bale y Karim Benzema. Dando en la Supercopa de España un nuevo giro táctico alineando a los cinco centrocampistas que tiene en su plantilla. Su racha en las finales la pone a prueba un viejo conocido.