No bastó el buen momento del sueco Alexander Isak, que terminó lesionado y sustituido por Callum Wilson a cuatro minutos del final y que al principio del encuentro había abierto el marcador.
Porque el escandinavo, uno de los atacantes más cotizados del Viejo Continente, adelantó al Newcastle en el minuto 22 al transformar un penalti que cometió Yankuba Minteh.
Pero al borde del descanso, el propio gambiano enmendó su error al lograr el empate y finalizar a la perfección un pase de Joao Pedro. Minteh pidió perdón por su gol porque fue fichado en su día por el Newcastle, con el que, sin embargo, no llegó a jugar.
Nada rompió el equilibrio a pesar de que en el 83 el conjunto de Eddie Howe se quedó con diez jugadores por la expulsión de Anthony Gordon con roja directa. La situación se equilibró en el 91, justo antes de la prórroga, cuando el ghanés Tariq Lamptey vio la segunda amarilla y se marchó del campo.
El Brighton aprovechó el tiempo extra para sentenciar el triunfo y su clasificación para cuartos de final. Nació en un pase al espacio de Solly Marcha hacia Danny Welbeck que con un toque suave superó al meta eslovaco Martin Dubravka.
El Brighton del alemán Fabian Hurzeler se situó en cuartos de final de la Copa igual que el Aston Villa, el Manchester City, el Bournemouth, el Crystal Palace y el Preston.
Los octavos se completan con el duelo entre el Manchester United y el Fulham y el del Nottingham Forest y el Ipswich Town que se disputará el lunes. EFE