Tanto los medios de comunicación rusos como los aficionados del Rostov y la mayoría de los observadores del club destacaron este sábado el buen trabajo de los juveniles, de entre 16 y 19 años, tras hacerse viral en las redes la hazaña de estos jugadores.
No se habían entrenado en los tres meses en los que la liga estuvo suspendida por la pandemia del coronavirus, mientras que el Sochi sí pudo preparase unas semanas para la reanudación del campeonato ruso.
Los juveniles del Rostov, cuarto clasificado, viajaron al mar Negro y para sorpresa de todos a los 47 segundos del partido Román Románov, de 17 años, marcó.
Fue el primer y último gol de la jornada para el Rostov.
Pero Románov “se convirtió en la persona más joven en marcar en la historia de nuestro club y se encuentra ahora entre los tres más jóvenes en la historia de la liga rusa en marcar”, destacó el Rostov.
El resto del partido fue un asedio local.
No obstante, en el minuto 27 el portero del Rostov, Denis Popov, de 17 años, paró un penalti de Antón Zabolotni.
Solo fue el comienzo, dado que en total paró 15 tiros a su portería, un nuevo récord en al liga rusa, según el Rostov.
Eso sí, el portero juvenil encajó 10 goles.
La derrota por 10-1 es la mayor en la historia del campeonato ruso desde el año 2000, de acuerdo con la prensa deportiva rusa.
Pese a ello, Popov fue reconocido “muy merecidamente” como el mejor jugador del partido, tras “robar a todos el show”, celebró su club en un comunicado en su página web.