El Olimpiacos, el equipo más importante del fútbol griego, y el Atromitos están en peligro de descenso a Segunda división por un escándalo de corrupción y amaño de partidos que se remonta a 2015.
Según informaron los medios locales, unas 15 personas y los dos clubes se enfrentan a las penas más duras del reglamento del fútbol griego siguiendo el artículo 27 del Código de Conducta de la Federación de Fútbol Helena (EPO); “amañar el resultado de un partido con la finalidad de realizar apuestas”.
Las penas en cuestión son el descenso de los clubes implicados a la categoría inferior, una multa de hasta 3 millones de euros a cada equipo y una suspensión de por vida a cada individuo implicado.
Entre ellos está el controvertido presidente y propietario del equipo del Pireo, Evangelos Marinakis, también dueño del Nottingham Forest, de la Football League Championship, que tendría que renunciar a ambos clubes de ser finalmente condenado por la EPO.
Entre los demás acusados están Yorgos Spanos, dueño del Atromitos, Yorgos Sarris, expresidente de EPO, así como el vicepresidentes Aritidis Stathopulos, otros tres funcionarios de la Federación, seis antiguos árbitros, el entrenador portugués Ricardo Sa Pinto y el antiguo director técnico del Atromitos, Yannis Angelopulos.
El partido en cuestión se jugó el 4 de febrero de 2015 y acabó 2-1 a favor del Olympiacos. El encuentro ya fue investigado pero la EPO decidió archivar el caso.
En esta ocasión la investigación ha sido realizada durante seis meses por un miembro del Código de Conducta griego y ha concluido que existen sospechas razonables contra ambos clubes.
Además, se señala que hay otros tres partidos investigados que involucran al Olympiacos y al Panathinaikos, aunque aún no ha trascendido cuáles serían ni qué sanciones se barajan.