“No podemos ganar la Premier esta temporada. Podemos, y no digo que vayamos a hacerlo, pero podemos ganarla la próxima”, afirmó el entrenador en su presentación en el club del norte de la capital británica.
Mourinho, de 56 años, sustituye en el banquillo de los Spurs al argentino Mauricio Pochettino, despedido tras un inicio de temporada decepcionante, pese a haber conducido al Tottenham a la final de la Liga de Campeones la pasada campaña.
El portugués es el técnico en activo que más veces ha ganado la liga inglesa -tres, con el Chelsea-, aunque en esta ocasión hereda una plantilla que está situada en el puesto 14 de la tabla tras doce jornadas.
“No necesito jugadores. Estoy muy feliz con los que tengo. Solo necesito tiempo para comprenderles mejor y saberlo todo sobre ellos. Siempre digo que solo conoces a un jugador cuando trabajas con él”, indicó.
“Esta plantilla es muy, muy buena. Les he dicho que una de las razones por las que he decidido venir son ellos. Traté de comprar a algunos de ellos desde diferentes clubes, pero no pude”, aseguró el portugués.
Cuando todavía entrenaba al Chelsea, Mourinho aseguró que nunca entrenaría al Tottenham, uno de los rivales londinenses de los Blues.
El técnico bromeó hoy cuando los periodistas le preguntaron por esa promesa y aseguró que las circunstancias han cambiado: “Eso fue antes de que me echaran”, esgrimió.
“Voy a enfrentarme a algunos de mis anteriores equipos, por lo menos al Chelsea y al Manchester United, pero espero que también al Inter o el Real Madrid”, afirmó.
En esos partidos “solo tendré una cosa en mi mente, mi club, que ahora es el Tottenham”, recalcó José Mourinho.
“Gané la Liga de Campeones con el Oporto y tres meses después estaba jugando contra el Oporto. Así es la vida”, agregó.