Insigne, que había marcado el penalti del momentáneo 2-1, se retiró en el minuto 85 tras notar un problema en un abductor tras una aceleración y salió del campo visiblemente preocupado por una lesión que puede impedirle competir el 8 de agosto en el Camp Nou.
Profundamente fastidiado por lo ocurrido, en un partido sin trascendencia para el Napoli a nivel de clasificación, el capitán “azzurro” se arrodilló al suelo tras salir del césped para descargar su rabia.
El Napoli se adelantó en el marcador gracias al español Fabián Ruiz y, tras el momentáneo 1-1 del Bota de Oro Ciro Immobile, consiguió la victoria en la reanudación gracias a Insigne y a Matteo Politano.
El equipo de Gennaro Gattuso, vigente campeón de la Copa Italia, terminó la Serie A en la séptima posición y se concentrará ahora en la trascendental visita al Barcelona en el Camp Nou, en el que los dos equipos saldrán del 1-1 de la ida.