Sin margen de error por los triunfos previos de todo el grupo cabecero de la Premier, incluidas la del líder Chelsea frente el Bournemouth (3-0) y la del Arsenal contra el West Bromwich (1-0), el conjunto de Pep Guardiola no encontró la fórmula hasta el último tramo, cuando una innecesaria entrada de Andrew Robertson sobre Raheem Sterling fue castigada con penal, transformado por Touré.
El Manchester City, aún sin el argentino Sergio Kun Agüero, que cumplía partido de sanción, cercó a su rival durante los primeros minutos. Acaparó el balón, como suele ser habitual, y puso a prueba la fortaleza de un equipo que acumula ya siete partidos sin ganar. Cinco derrotas y dos empates. No sale de un encuentro de Premier con los tres puntos el cuadro de Mike Phelam desde que ganó el 6 de noviembre al Southampton.
Guardiola perdió al central John Stones en el minuto 18. Después, tuvo su ocasión más clara al inicio de la segunda mitad, con un disparo al poste del belga Kevin De Bruyne.
El City, sin puntería, perdió el mando del partido. A la hora de juego el Hull tuvo su ocasión con un remate de Michael Dawson y una mala salida del meta Claudio Bravo sobre la línea evitó el gol de cabeza el francés Bacary Sagna.
Para entonces, Guardiola ya había decidido recurrir al nigeriano Kelechi Iheanacho que ocupó el lugar del Nolito. Fue el atacante africano el que sentenció el partido al rematar a puerta vacía un centro por la derecha de David Silva.
En el tiempo añadido, un gol en propia puerta de Curtis Davies en una jugada de Sterling, amplió la renta del City y afeó el trabajo del cuadro local, anclado en la última plaza, a cuatro de la salvación.
La victoria deja al Manchester City segundo en la tabla, a la espera del partido que el martes jugará el Liverpool contra el Stoke City. Los ‘citizens’ están a siete puntos del líder, el Chelsea y dos por encima del Liverpool y el Arsenal. El Tottenham, que cerrará la decimoctava jornada el miércoles contra el Southampton y el Manchester United, que ganó al Sunderland, están cuatro puntos por detrás. EFE