Tras ser aplazado su partido del viernes contra el Deportivo en Riazor por los efectos del temporal, y descansar el fin de semana, la plantilla verdiblanca se ejercitó este lunes en su Ciudad Deportiva en una sesión a puertas abiertas. La principal nota positiva fue la recuperación de estos internacionales sudamericanos.
Felipe Gutiérrez sufrió el último 4 de enero, durante un entrenamiento, un esguince en el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha con un edema óseo; y, a las tres semanas, una resonancia reveló que no tenía rotura, aunque sí un edema en el platillo tibial.
Sanabria sufrió cuatro días después una rotura de grado I-II del recto anterior del cuádriceps derecho, en el encuentro frente al Leganés. Ha cumplido el plazo de recuperación de cuatro semanas previsto, por lo que, al igual que el chileno, podrían acelerar su puesta a punto y estar listos para recibir el sábado al Valencia.
Según informó el club, también volvieron al trabajo con el resto de sus compañeros el lateral italiano Cristiano Piccini y el central holandés Ryan Donk, ya restablecidos de la sobrecarga en el músculo poplíteo de la pierna derecha y del esguince de tobillo, respectivamente, que les impidieron viajar a La Coruña.
Por el contrario, el técnico del Betis, Víctor Sánchez, no ha podido contar en el retorno a los entrenamientos con el lateral izquierdo Álex Martínez, que ha sido baja por una gastroenteritis.
Además, el capitán Joaquín Sánchez, el central canterano José Carlos Ramírez y el extremo Álvaro Cejudo, continuaron con sus respectivas labores de readaptación funcional para recuperarse de las lesiones que arrastran desde hace un tiempo.
El extremo portuense y el joven defensa de Paradas (Sevilla) se ejercitaron juntos en el gimnasio, y, después, sobre el césped, mientras que el cordobés Cejudo trabajó en solitario. EFE