La selección de Nigeria arrancó su andadura en la Copa de África de fútbol, que se disputa en Camerún, con un golpe de autoridad, tras imponerse este martes por 1-0 a Egipto en un encuentro en el que Kelechi Iheanacho le ganó la partida a Mohamed Salah.
Mientras que el delanteto del Leicester inglés no desaprovechó a la media hora de juego un pase de Joe Aribo para firmar el que a la postre sería el definitivo 1-0 con un sensacional remate, la superestrella del Liverpool se estrelló a los 70 minutos con el portero nigeriano Maduka Okoye en la mejor oportunidad del conjunto egipcio.
Un fiel reflejo del gris partido de los “faraones” que se vieron superados en todo momento por una Nigeria perfectamente liderada por un sensacional Wilfred Ndidi, jugador del Leicester, en la medular.
De hecho, el equipo nigeriano, en el que el delantero del Villarreal Samuel Chukwueze actuó como titular, pudo doblar su ventaja a los tres minutos de la segunda mitad en un remate de cabeza de Taiwo Awoniyi que se estrelló en el larguero.
Posteriormente llegaría la oportunidad de Mohamed Salah, pero el delantero del Liverpool no estuvo acertado en la definición condenando a los de portugués Carlos Queiroz a la derrota.
Un resultado que situó a Nigeria en la primera plaza del grupo D en espera del encuentro que enfrentará esta noche a Sudán y Guinea-Bisáu.