Rica historia. En 1979, 1990 y 2002, el Decano se consagró campeón de América.
1979. Olimpia ganó el Grupo 2 sobre Sol de América (le ganó ambos juegos 2-1 y 0-1) y los equipos bolivianos Bolívar (derrota en La Paz 2-1 y victoria en Asunción 3-0) y Jorge Wilstermann (le ganó en Asunción y Cochabamba: 2-0 y 2-4). Integró el grupo semifinal B, donde dejó en el camino al chileno Palestino (2-0 en Sajonia y 3-0 en Santiago) y al brasileño Guaraní de Campinas (1-1 en Brasil y 2-1 en Asunción).
La primera vez. El capitán Hugo Talavera recibe la preciada Copa en la mismísima Bombonera. Foto: Última Hora.
Jugó la final contra el bicampeón vigente: Boca Juniors. El primer partido final se jugó en el estadio Defensores abarrotado de público (49.005 pagantes) y terminó con victoria local por 2-0 con goles de Osvaldo Aquino y del uruguayo Miguel Ángel Piazza.
El 27 de julio de 1979, en el estadio Alberto J. Armando (La Bombonera) terminaron 0-0 con 4 expulsiones (Carlos Kiese y Roberto Paredes en Olimpia) y ningún gol, por lo que Olimpia se convirtió en el 9.º campeón continental, el primer campeón no argentino, uruguayo o brasileño en la historia de la Copa, en su vigésima edición.
1990. Olimpia llegaba de perder la final de 1989. Cerro Porteño y los brasileños Vasco da Gama y Gremio fueron los compañeros de serie de Olimpia en el Grupo 5.
Carísimo Netto y Cristóbal Cubilla levantan el trofeo en el Monumental, tras igualar 1-1 con Barcelona. Foto: Última Hora.
De local ganó 2-1 a Cerro y luego perdió 2-3; a los brasileños les ganó 1-0 a Vasco y 2-1 a Gremio. El fixture determinó que Olimpia pase directamente a cuartos de final donde el rival fue Católica de Chile. A los cruzados los dejó en el camino tras vencer 2-0 en Asunción e igualar 4-4 en el San Carlos de Apoquindo.
La semifinal fue la prosecución de un clásico naciente contra el Nacional de Medellín, que en ese momento tenía prohibido jugar en casa por una suspensión de FIFA. Lo hizo en el Santa Laura de la Unión Española, en Santiago de Chile. Allí ganó Olimpia 2-1, aunque los albiverdes se desquitaron en Asunción (2-3), lo que obligó a otra definición infartante desde los penales: El 26 de noviembre de 1990 Olimpia alcanzó otra final más al ganar esa definición por 2-1 con relevante actuación de su mítico arquero Éver Almeida, al parar los penales de Hernández, Galeano y Pérez.
Esas finales fueron ante el Barcelona de Guayaquil, Ecuador. La primera tuvo como escenario el Defensores el 3 de noviembre y se definió a favor del local mediante goles de Raúl Amarilla y Adriano Samaniego. La revancha se disputó el 10 de noviembre en el Monumental de Guayaquil y, tras otro penal parado por Almeida, esta vez en los 90’ (a Acosta), el local se puso en ventaja por intermedio del argentino Trobbiani, pero a 10 minutos del final, Amarilla anotó el empate que sentenciaba el segundo título de campeón continental en la historia del club.
2002. La sexta final de Olimpia fue en la edición 43. En el grupo inicial Olimpia compartió con el Once Caldas colombiano (3-2 y 1-2), el Flamengo carioca (0-0 y 2-0) y la Universidad Católica (1-0 y 1-1). En octavos su rival fue el Cobreloa, al que derrotó en Calama luego que el partido se suspendiera por disturbios (la Conmebol dio un 2-0 final); en Asunción la victoria fue por 2-1 (Richard Báez y Miguel Benítez).
Julio C. Enciso levanta la Copa, la tercera decana, en el estadio Pacaembú de San Pablo. Foto: Última Hora.
Los cuartos fue ante Boca Juniors; en Buenos Aires fue 1-1, Traverso c/s/v para Olimpia. En Asunción fue 1-0 con gol de Néstor Isasi. La semifinal contra el Gremio, en Asunción, ganó Olimpia por 3-2 con tantos de Sergio Órteman (2) y otro del Pe q u e Benítez; en Porto Alegre el triunfo fue del Gremio por 1-0; en penales fue 5-4, el 17 de julio de 2002, con un penal atajado por el Mono Tavarelli.
En la final, Sao Caetano ganó en Asunción por 0-1 con gol de Ailton, el 24 de julio. El 31 de julio, fue 2-1 con goles de Gastón Córdoba a los 3 de la etapa final y Richard Báez a los 58 minutos. El capitán Enciso, Órteman, López y Caballero marcaron para aprovechar los yerros de Marlon y Serguinho, y darle a Olimpia su tercer título de campeón de América.