El Zenit inauguró este miércoles brillantemente su casillero al derrotar con suma facilidad a un inocente Malmoe (4-0) que cometió demasiados errores para un equipo de la Champions League y que jugó desde el minuto 53 con un jugador menos por la expulsión del bosnio Anel Ahmedhodzic.
La conexión brasileña -Malcom, Douglas Santos, Wendel y Claudinho-, comienza a funcionar. Fabricó el primer gol y marcó último.
Además, los suecos dieron muchas facilidades en defensa, a lo que se sumó la expulsión directa de uno de sus centrales poco minutos después del descanso.
Con el fichaje por el Zenit del brasileño Claudinho, campeón olímpico en Tokio, el delantero iraní Azmoun se ha quedado sin sitio y arrancó desde el banquillo. Los rusos cayeron en Londres por la mínima en la primera jornada, pero tuvieron opciones de arrancar un empate ante un gris Chelsea.
Por parte del equipo visitante, dirigido por el legendario delantero danés, Jon Dahl Tomasson, salió con el croata Colak y el serbio Birmancevic como pareja de ataque, la misma que cayó a mediados de septiembre ante la Juventus (0-3).
El Zenit golpeó primero por medio de Claudinho que ha caído de pie en el equipo de la antigua capital zarista. Fue una jugada fabricada en Brasil.
La inició el exbarcelonista Malcom, la prolongó el lateral Douglas Santos, cuyo pase de la muerte fue aprovechado por Claudinho para inaugurar el marcador. (min.9)
No obstante, desde entonces los suecos asumieron el control del juego y dieron varios sustos al guardameta ruso.
Cinco minutos después Colak estuvo a punto de soprender al Zenit a pase de su compañero serbio. A los veinte minutos el danés Christiansen también tuvo en sus botas el empate, pero su disparo duro salió ligeramente por encima del larguero.
Al filo del descanso los rusos parecieron sacudirse el dominio visitante, pero sin llegar a crear mucho peligro. Sólo Malcom pudo aumentar la ventaja local, pero su disparo con la pierna mala salió mordido.
El Zenit, muy criticado en los últimos años por su mandíbula frágil, intentó cerrar el partido en los primeros minutos de la segunda parte. Lo logró en un visto y no visto.
Así, en una jugada embarullada, Kuzyáev pudo rematar a gol un centro del central Rakitskiy ante la pasividad de la defensa escandinava. (min.49)
Por si fuera poco, el bosnio Ahmedhodzic fue expulsado seguidamente de roja directa al golpear con la mano el balón en un contraataque al que llegó primero un veloz Kuzyáev.
Los rusos tenían el partido en la mano. Tomasson intentó mover el árbol con tres cambios, unos para apuntalar la defensa y otros para añadir más mordiente al ataque, pero fue el Zenit el que tuvo más opciones de aumentar la cuenta.
De hecho, en ese momento Azmoun saltó al terreno de juego, aunque fue Sutormin, centrocampista reconvertido en lateral largo el que marcó el tercer gol con un buen disparo desde fuera del área con la zurda. (min.80)
La goleada pudo ser mayor de no ser por las buenas intervenciones de Dahlin, especialmente a cabezazo de Azmoun en el descuento. Lo mismo hizo poco después tras un disparo del delantero iraní, pero Wendel aprovechó el rechace para colarle el balón entre los piernas.
El Zenit, que hace muchas temporadas que no pasa de la primera fase en “Champions”, logró un saco de goles y aún mantiene intactas sus esperanzas de dar la sorpresa a la Juventus y el Chelsea.