Cruzeiro, el equipo de Belo Horizonte, uno de los clubes históricos de Brasil, garantizó su ascenso a la elite del fútbol brasileño con una goleada en casa por 3-0 ante el Vasco da Gama, en un estadio Mineirao abarrotado, ante la presencia de su propietario.
Ronaldo, quien compró el club en diciembre de 2021, vio el partido desde la banda, celebró los goles del equipo y saltó al césped tras el pitido final para felicitar a los jugadores.
“Esto es la guinda del pastel. Trabajamos mucho para conseguirlo”, dijo Ronaldo a la televisión brasileña nada más terminar el encuentro, agradeciendo a los jugadores, a la comisión técnica y a la afición.
Con su victoria de este miércoles, el Cruzeiro alcanzó 68 puntos, con quince de ventaja sobre el Gremio, segundo colocado, y 20 unidades sobre el Vasco da Gama, que ocupa el cuarto y último de los puestos de ascenso.
En 31 jornadas, el club azul de Belo Horizonte ha ganado 20 partidos, ha empatado ocho y ha perdido apenas tres, todos ellos lejos del Mineirao.
El Cruzeiro es uno de los doce equipos más grandes de Brasil, tiene en sus vitrinas cuatro títulos de campeón nacional y otros dos de la Copa Libertadores, entre otros títulos.
El club descendió a la segunda división del Campeonato Brasileño en 2019 por primera vez en su centenaria historia, en medio de una grave crisis financiera.
Ronaldo afirmó que de cara al año que viene, en primera división, el club enfrentará “dificultades financieras”, pero prometió “compensar la falta de dinero con sacrificio”.
El exjugador de la selección brasileña, también propietario del Valladolid español, anunció en diciembre de 2021 la compra del Cruzeiro, el equipo en el que se dio a conocer en su juventud, con el objetivo de subsanar las cuentas y devolverlo a su lugar en la elite.