“La decisión de llevarle a juicio es un ensañamiento absurdo e injusto”, señaló por su parte a Efe el abogado del jugador, Sylvain Cormier, para quien “Benzema no tiene nada que reprocharse en este sumario”.
Una portavoz de la fiscalía señaló a Efe que la acusación contra Benzema es un delito, y no un crimen, según el Código Penal francés.
Añadió que otras cuatro personas irán también a juicio por este caso, pero acusadas de intento de chantaje. La fecha del proceso no ha sido establecida aún.
El caso se remonta a 2015, cuando dos hombres que tenían un supuesto vídeo íntimo de Valbuena con su esposa trataron de hacerle chantaje, y, ante su negativa, contactaron con un amigo de infancia de Benzema para obtener la mediación del madridista, quien habló con la víctima durante una concentración de la selección francesa.
Cormier destacó que la decisión del tribunal correccional de Versalles al menos abandona definitivamente la posibilidad de juzgar a Benzema por la acusación más grave de asociación de malhechores.
El abogado también lamentó que el juez instructor “ha deformado los hechos” porque el propio Valbuena reconoció que en la controvertida conversación con Benzema “no se habló de dinero”.
Aun así, reconoció que “no” están “sorprendidos” por la decisión de encausar a su cliente después de cómo se ha desarrollado la instrucción del caso, si bien confió en las explicaciones que darán “ante el tribunal”.
Los hechos comenzaron cuando en el verano de 2014 Axel Angot y Mustapha Zouaoui, que trabajaban para Valbuena en Marsella, se hicieron con el vídeo de contenido sexual en el que aparecía el jugador con su esposa.
A través de un conocido común, según la acusación, entraron en contacto con el futbolista en junio de 2015 para exigirle dinero a cambio de no difundirlo.
Valbuena se negó a pagar y puso los hechos en conocimiento de la policía.
Entretanto, los presuntos chantajistas contactaron con otro jugador, Djibrill Cissé, para que persuadiera a Valbuena de que debía pagar. Como no tuvieron éxito, se dirigieron a Karim Zenati, amigo de infancia de Benzema, para obtener la mediación del madridista.
El 5 de octubre de 2015, durante una concentración de la selección francesa, Benzema fue a la habitación de Valbuena y le dijo que sería mejor que pagara para evitarse problemas.
El madridista sostiene que le dio un consejo de amigo, pero la acusación consideró que era una medida de presión, por lo que le imputaron el 5 de noviembre de 2018 por un delito de complicidad en chantaje, por el que puede ser condenado hasta a cinco años de prisión.
El caso supuso que Benzema, de 33 años, no volvió a ser convocado con la selección francesa desde finales de 2015, pese a que, incluso, desde la Federación se afirma que no hay vetos contra él. A pesar de ello, el jugador suma 81 partidos y 27 goles con los “bleus”.