Esto produjo que el DT decano se encuentre entre la alegría y el dolor; alegría, por la concurrencia del público olimpista que reconoció el esfuerzo de sus dirigidos en el torneo internacional; y dolor porque no se pudo conseguir la cuarta.
En conferencia de prensa, el entrenador subrayó, tras ganar 3-1 a Sportivo Carapeguá, que la hinchada “hoy más que nunca demostró un agradecimiento hacia los jugadores. Fue muy emotivo. Me dio alegría y un poco de dolor, porque queríamos corresponderle de otra manera. Se pudo haber traído la Copa, por eso quedó un poco de impotencia”.
Del resultado del compromiso ante el Potro señaló que “necesitábamos este triunfo por muchas cosas, por lo anímico y para comenzar este campeonato que es nuestra meta”. “Hicimos los goles en los momentos justos, y nos dio tranquilidad. Sportivo Carapeguá nunca se entregó y nos obligó a cambiar de sistema”, sentenció.