Tras el empate 0-0 que firmaron la semana pasada en Río de Janeiro en el partido de ida y que dejó el duelo abierto, el semifinalista será el que consiga una victoria por cualquier marcador el miércoles. En caso de un nuevo empate, tendrán que decidir la clasificación en los penaltis.
El vencedor en este clásico se medirá en semifinales al que se imponga en el duelo entre Flamengo y Peñarol, en el que el conjunto uruguayo parte con la ventaja de jugar la vuelta en casa tras haber vencido por 0-1 en su visita al Maracaná.
El São Paulo cuenta con la ventaja de jugar en casa, donde generalmente el equipo comandado por el técnico argentino Luis Zubeldía tiende a cosechar buenos resultados, pero el Botafogo se ha convertido en el equipo brasileño con mejores resultados como visitante este año: 14 victorias, 8 empates y solo 7 derrotas en 29 partidos.
El conjunto paulista no ha conseguido ninguna victoria en sus últimos siete partidos contra el Botafogo. La última vez que lo venció fue en septiembre de 2020 en un partido de Liga.
Los locales llegan con la ventaja de haber resistido al demoledor ataque del Botafogo en el partido de ida con su fuerte defensa, mientras que los visitantes lo hacen en la condición de líderes indiscutibles del Campeonato Brasileño y favoritos al título.
En el partido de ida, el Botafogo tuvo 22 finalizaciones y no consiguió abrir el marcador, mientras que el São Paulo, con solo seis finalizaciones, por poco consigue una victoria a domicilio con un gol desperdiciado por el argentino Jonathan Calleri.
En los partidos de la Liga del fin de semana, el São Paulo, con solo dos titulares en su alineación, cayó por 1-3 en casa frente al Internacional, mientras que el Botafogo, comandado por el técnico portugués Artur Jorge y con un equipo mixto, se impuso por 1-0 al Fluminense.
El São Paulo, sin embargo, tiene más tradición en competiciones internacionales, con tres títulos de la Libertadores y dos mundiales, aunque no llega a una semifinal del torneo continental desde 2016, mientras que el Botafogo nunca ha ganado la competición, de la que solo ha disputado dos semifinales.
Sin jugadores suspendidos, ambos equipos disputarán el partido de vuelta de cuartos de final prácticamente sin cambios con respecto a las alineaciones de la semana pasada.
La única duda es si Zubeldía reforzará su ataque con el regreso del delantero Luciano, uno de los mayores anotadores del equipo y que ingresaría en el lugar de William Gomes.