El equipo genovés, entrenado por Davide Nicola, disputó un choque directo por la permanencia, pues lo encaraba colocándose en la zona roja de la tabla ante un Spal que tenía una de sus últimas oportunidades para ir a por una complicada permanencia.
El veterano delantero macedonio Goran Pandev adelantó al cuadro local en el minuto 24, al aprovechar una asistencia del español Iago Falque, y el danés Lasse Schone sentenció el encuentro al comienzo de la segunda parte (m.54) con su especialidad, una excelente falta directa.
Jugó un partido sólido el Génova y la ventaja pudo ser aún mayor si Iago Falque no hubiese fallado una pena máxima con el resultado de 1-0 en el marcador. Los penaltis no son aliados del equipo genovés este año, pues con este ya son cinco los fallos desde los once metros.
Se quedó en una anécdota y cogió aire el Génova, que lleva cinco partidos sin victorias, y aumentó la presión sobre el Lecce, en un tramo final de Serie A de alta tensión en la lucha por mantener la categoría.