El exlateral brasileño Cícero Joao de Cézare ‘Cicinho’, que entre otros equipos europeos jugó en el Real Madrid cerca de dos años, reveló en una columna publicada este lunes en el diario ‘Estado de Sao Paulo’ que sufrió alcoholismo durante casi 20 años.
“Comencé a beber con 13 para 14 años, cuando fui para el Botafogo de Ribeirao Preto. Me dijeron que la cerveza era buena y tomé. Todo comenzó con el primer trago y fui a parar con 30 años. Casi 20 años bebiendo”, confesó el exfutbolsita en su escrito, en el que aseguró que llegó a beber “más o menos diez cajas de cerveza por día”.
Cicinho explicó que hasta su fichaje por el Atlético Mineiro, en el comienzo de su carrera deportiva, “solo” bebía cerveza porque “no tenía dinero”, pero que después “pasó a beber de todo”.
“Y cigarro. Fumé durante 11 años, de 1999 a 2010. Solo fumaba cuando bebía, pero mira que bebía.... Todo el día”, añadió.
Asimismo, relató que percibió que estaba pasándose de la raya cuando comenzó a perder “el placer” de “jugar al fútbol”.
“Siempre fui un enamorado del fútbol. Cuando Dios da un don y no sabemos administrarlo es porque hay algo que va mal. No tenía más placer de entrar en campo, entrenar y concentrarme. Tenía 30 años y estaba jugando con el Roma, en 2010", manifestó.
Cicinho, hoy con 39 años, anunció su retirada del fútbol en marzo de 2018 debido a sus constantes problemas de rodilla.
Empezó a despuntar en Brasil con la camiseta del Sao Paulo, con el que ganó la Copa Libertadores de 2005 y el Mundial de Clubes de ese año.
Su buen desempeño con el conjunto paulista llamó la atención del Real Madrid, que lo contrató a finales de 2005 aunque lo traspasó poco más de un año y medio después al Roma.
El lateral regresó a España de la mano del Villarreal y cerró su periplo europeo en el Sivasspor turco, previo paso por el Sport de Recife de su país.
Con la selección brasileña ganó la Copa Confederaciones en 2005 y estuvo convocado para el Mundial de Alemania 2006 para sumar un total de 17 participaciones con la Canarinha.
Cicinho afirmó que empezó el camino de su rehabilitación de los problemas con el alcohol cuando conoció a su mujer.
“Ella me animó a conocer los principios que tenía, que eran orientados a la palabra de Dios, y fue así que tuve mi transformación”, resumió.
Asimismo, anunció que recibió una oferta para volver a vestirse de corto con el Vila Nova de Goiás, si bien la rechazó porque asegura que ya se siente realizado como futbolista y prefiere concienciar a otros jóvenes sobre lo que le ocurrió.
“El fútbol fue una fase en mi vida. Ahora mi fase es mostrar mi testimonio y ayudar a las personas para que no caigan en el camino donde yo caí. Doy conferencias de motivación. No estoy en condiciones para jugar, mi mente es de exfutbolista, mi cuerpo ya está acostumbrado”, apuntó.
Reveló que la primera vez que expuso su problema “fue muy criticado”, pero sostuvo que cuando una “persona habla abiertamente” sobre ese tipo de asuntos es porque “superó todos los traumas” al respecto.
“Hace ocho años que no tengo problemas con el alcohol y el cigarro. No traiciono a mi mujer, vivo los principios que Dios me pide. Espero que las personas lo miren por el lado del auxilio porque es triste ver a grandes jugadores del fútbol brasileño y mundial con el poder de influir por el lado bueno, y que lo hacen por el lado malo”, completó.