El partido iba a jugarse en principio con restricciones para los residentes de Lombardía, Véneto y Emilia, así como para los que viven en las provincias de Savona y Pesaro-Urbino.
Inicialmente se pensó en jugarlo a puerta cerrada, pero a las 21.30 llegó la orden del Prefecto, que aplazó el partido hasta una fecha por determinar.