“En el día de hoy el futbolista recibió el alta sanatorial, retirándose a su domicilio particular para continuar con un reposo relativo”, publicó la entidad de La Plata (provincia de Buenos Aires) en su cuenta de la red social X.
Después de pasar por varios centros médicos, incluido el último, el Instituto Fleni de Buenos Aires, especializado en casos neurológicos, Altamirano pudo regresar a su casa para continuar el proceso de recuperación y descanso.
El desvanecimiento, con un episodio de convulsiones incluido, tuvo lugar a los 27 minutos del encuentro entre el ‘Pincha’ y el ‘Xeneize’, correspondiente a la undécima jornada de la Copa de la Liga del fútbol argentino, hecho que suspendió el partido, que aún no tiene fecha para su disputa.
Tras la rápida actuación de los servicios médicos, el chileno fue llevado al Instituto Médico Platense, cerca del Estadio Jorge Luis Hirschi, donde pasó una primera noche muy tranquila, acompañado de su esposa, embarazada de siete meses.
Al día siguiente fue trasladado al Hospital Italiano, también de La Plata, donde se continuaron los estudios, que determinaron que la causa de las convulsiones sufridas en el campo por Altamirano fue “una trombosis del seno longitudinal superior (cerebro)”, por lo que fue derivado a la clínica capitalina.
El jugador con pasado en el Huachipato chileno llegó a La Plata en agosto pasado, tras un fichaje en el que el Estudiantes adquirió el 50 % de sus derechos económicos por un millón de dólares y firmó contrato hasta junio de 2026.
Altamirano fue una de las piezas claves en el equipo que conquistó la Copa Argentina el curso pasado, la primera en la historia del club.
Además, desde 2023 el jugador es un fijo en las convocatorias de la selección chilena y, de hecho, había sido citado por el nuevo técnico, el argentino Ricardo Gareca, para los recientes compromisos amistosos de la ‘Roja’ ante Albania en Parma (Italia) y contra Francia en Marsella.