La atracción está puesta en barrio Obrero desde las 17:00, cuando se enfrenten Cerro Porteño y Olimpia, en una edición más del superclásico del fútbol paraguayo.
Con realidades diferentes se encuentran ambos equipos. El Ciclón, que llega con una racha en el plano local de 6 juegos en donde consiguió ganar, pero con un panorama distinto en el plano internacional, en donde en sus últimas dos presentaciones cayó y complicó su clasificación.
En contrapartida, el Decano es un equipo completamente distinto en ambos frentes. En la Libertadores marcha invicto, mientras que en el Apertura no gana desde hace dos compromisos, y solo consiguió 6 victorias en lo que va del certamen, lo que lo ubica en una incómoda quinta plaza, muy lejos de la zona alta.
En el Azulgrana, que vuelve a improvisar en zona defensiva con Piris Da Motta, otorga la chance de arrancar a Álvarez, mientras que no será de la partida titular Robert Morales, por un golpe sufrido desde hace ya dos semanas. A su vez en el Franjeado, el DT Diego Aguirre prepara una fórmula osada, buscando poblar su zona de ataque, uno de los puntos más flojos desde que asumió la conducción.
