El portero de Nacional, Ignacio Don, fue el artífice de una gran tapada nada menos que a Ronaldinho, un lujo que pocos pueden darse.
Esta tapada terminó siendo decisiva para la Academia, que terminó igualando 1-1 para traer un punto de Brasil, nada menos que ante el vigente campeón de la Copa Libertadores.
Ronaldinho justificó el penal que malogró, alegando que Don lo venía estudiando hace tiempo y dio todo el mérito al arquero argentino, nacionalizado paraguayo.
"Él me conoce bien, venía estudiándome hace mucho tiempo y terminó atajando bien. Chuté fuerte, a un palo, y él acertó el palo”.
Ronaldinho añadió que el segundo penal contra Nacional no lo ejecutó de la mejor manera, ya que fue al medio, y sin embargo terminó en el fondo del arco. Comparando con el primer remate señaló que no siempre una buena ejecución termina en gol.