Por Pedro Lezcano - @pedritolezkano
Sujeto a grúa, el pesado equipo de Libertad intentó retirarse del polideportivo Osvaldo Domínguez Dibb con la frente en alto. No pudo, se fue golpeado y aceptando que en la noche del lunes chocó ante un murallón.
Los 5, 6, 7, 8 de Juan Pablo Feliú y la tribuna copada por la hinchada presente. Banderas, agite y un caño (trompeta) que aplicaba melodía a la simbiosis propia del ambiente deportivo.
Con la noche fría, el calor entonces tuvo lugar dentro del ODD desde que la pelota comenzó a botar para el primer cuarto. En el equipo local: Rodney, Martínez, Ljubetic, Peralta y Araújo pisaron de entrada el párquet. El californiano Leon Gibson lideraba la contrapartida.
El primer cuarto fue sobrio para Olimpia. Detrás de uno de los aros, el gentío comenzaba también su partido. 27-14 en el score pintaban un panorama de encuentro a fases previas al cuadrangular, tiempo en el que por lo general el más favorecido de los cuadros monopoliza la canasta hasta agotar el cronómetro por marcada diferencia.
Sin embargo, en el segundo cuarto la visita despertó y mostró de qué esta hecha. Con qué habrá que luchar hasta probablemente el final del Metropolitano.
De triple en triple remontó el recuerdo aquel del jueves 11 de mayo, fecha en que el Carlos Montalbetti hizo escenario al corte de la tremenda racha de 33 victorias seguidas de los Olimpia Kings hasta entonces.
Otra vez, los vestidos de blanco se caían sin poder concretar durante los siguientes 07' 11'’ ninguna jugada generada. 39-36 quedó el tablero al sonido de la chicharra que determina el descanso y posterior cambio de lados.
Postal del Olimpia - Libertad. Foto: Miguel Houdin
COMPLEMENTARIA. Libertad volvió al tercer periodo con determinación. Con la premisa necesaria para teñir todo de rojo y negro el cuarto. 59-60 lo daba vuelta y el pequeño cúmulo de aficionados gumarelos que acompañó a su equipo se hizo notar a fuerza de aplausos.
Aún así, nada estaba definido. En la última fracción, ahí donde los grandes están llamados a hacer historia, se desató también la mejor parte del juego. Probablemente el partido más atractivo, de entre todos los deportes del país, de lo que resta de la semana.
Sin lugar a dudas, ambos equipos libraron una fiesta anotación tras otra. Hernán Pellerano, refuerzo de los más destacados del actual plantel del fútbol masculino franjeado, acompañaba con el movimiento de los pies el ritmo de las gargantas.
El Gumarelo cedió. Es real que en cualquier espectáculo la localía pesa. En un predio cuyas instalaciones los mantiene pegados a la cancha, cerca de sus ídolos, la barra del Olimpia estallaba en júbilo y su intervención musical inyectaba una dosis más de ánimo a los pupilos.
Lo sabrá Javier Martínez, quien siendo el más veterano fue también quien más anotara. Un total de 26 puntos totalizan tal motivación.
En sus tiros libres, con el reloj en contra, fallaron bastante también los chicos del Presidente y así Olimpia inclinó la balanza 83 a 78 para rematar la primera rueda del Cuadrangular arriba con 6 puntos.
La historia se volvía a repetir, pero más parecida al choque de hace dos semanas atrás cuando en fase Hexagonal, Olimpia se tomaba su primera revancha en el ODD.
En la otra cita de la serie, Sol de América superó por 86 a 74 a Sportivo Luqueño y con 4 unidades sigue en carrera por los Play Offs.
REVANCHAS. Libertad vs. Sol de América y Olimpia vs. Luqueño animarán la próxima fecha a disputarse el próximo jueves.