Tras nueve exitosos años en el Real Madrid, en los que Cristiano conquistó 49 trofeos a nivel de club y personal, el portugués sintió la necesidad de abrir una nueva etapa en su carrera y fichó por la Juventus a cambio de 112 millones de euros.
Y el nuevo capítulo de la trayectoria futbolística de Cristiano se abre este lunes, con el reconocimiento médico y la firma sobre un contrato que le vinculará a la Juventus para las próximas cuatro temporadas a cambio de 31 millones de euros netos por año.
Conquistar cinco Ligas de Campeones, ganar los campeonatos ligueros en Inglaterra y en España, levantar cinco Balones de Oro y hacer historia como máximo artillero de la Liga de Campeones no es suficiente para calmar a un Ronaldo que sigue hambriento de gloria.
Por ello, el luso decidió aceptar la propuesta del Juventus y lanzarse a por una nueva experiencia en la Serie A italiana (Primera División), en un club que siempre le ha gustado y por el que ya tuvo opción de fichar al comienzo de su carrera, antes de recalar en el Manchester United.
Son muchos los retos que esta nueva experiencia supone para Cristiano: el principal es ayudar a la Juventus a conquistar una Liga de Campeones, un trofeo que falta en las vitrinas de los turineses desde 1996.
En estos 22 años, la Juventus padeció unas amargas decepciones europeas, al alcanzar y perder tres finales, en Manchester 2003, Berlín 2015 y Cardiff 2017.
Precisamente Ronaldo fue quien le negó a los turineses la alegría en la final de 2017, cuando acabó con los sueños de Gianluigi Buffon y sus compañeros al marcar para el Real Madrid un doblete determinante para el 4-1 final.
Tras conquistar las últimas tres ediciones consecutivas de la Copa de Europa y cuatro de las últimas cinco, Ronaldo es posiblemente el hombre más adecuado para romper la sequía europea de la Juventus.
El portugués intentará agrandar su leyenda en la nueva campaña europea y convertirse en el máximo goleador de la Liga de Campeones por séptimo año seguido.
Sin embargo, Cristiano también tiene la posibilidad de conquistar el título liguero en el tercer país distinto, tras hacerse con tres Premier League en el Manchester United y con dos Ligas españolas en el Real Madrid.
La Juventus, que triunfó en las últimas siete ediciones, sale como absoluto favorito en la nueva temporada y contará con los goles de Ronaldo para frustrar los sueños de gloria de sus principales contendientes, como el Nápoles, el Roma o el Inter de Milán.
Un estímulo extra para el delantero ruso es mejorar el récord de goles de la historia de la Serie A (36), que pertenece desde 2016 al argentino Gonzalo Higuaín, su nuevo compañero en el Juventus.
El “Pipita” selló esa marca en 2016, cuando vestía la camiseta del Nápoles, al mejorar por una diana el anterior récord del sueco Nils Nordahl, que resistía desde 1950.
Ronaldo, que en el curso 2014-15 logró anotar 48 goles en la Liga, buscará arrebatar este registro al argentino y dar un golpe en la mesa ante quienes sostienen que marcar a los equipos de la Serie A es más complicado con respecto a otras ligas europeas.
Conseguir este tipo de resultados podría abrir al portugués el camino al que sería su sexto Balón de Oro, tras el que conquistó con el United (2008) y los que alcanzó con el Madrid (2013, 2014, 2016, 2017).
A sus 33 años, Cristiano sigue luciendo números extraordinarios y un estado atlético todavía de primer nivel, lo que le permite encarar su nueva etapa en la Juventus con máximas ambiciones, para agrandar una leyenda ya indeleble. EFE
