Con actitud tranquila y gran amabilidad, sencillo, familiero y con un trato de mucho afecto a sus amigos, el bicampeón de la Copa Libertadores de América y capitán de la Selección Paraguaya, Gustavo Gómez Portillo, disfrutó hace un par de días de un encuentro con la familia y sus amigos en San Juan Bautista, Misiones.
Recientemente campeón de la Copa Libertadores y ganador de otros títulos más con el poderoso Palmeiras de Brasil, el defensor que integra el equipo ideal de América confesó que tenía la necesidad de compartir con sus familiares y amigos tras un largo año futbolístico.
Fuera de sus compromisos como futbolista, aprovechando sus cortas vacaciones, Gustavo Gómez prefirió compartir con sus padres, sus suegros, sus hermanos, cuñados, sobrinos, su familia integrada por su esposa Jazmín, sus hijos Pia y Lucca y sus amigos de siempre en su pueblo natal. También se encontró con Néstor Camacho y Ángel Pika Lucena.
FELIZ. ”Estoy muy contento por estar con mi gente y con los amigos porque siempre tengo en cuenta el respaldo que recibo de mi familia y de mis amigos, por eso quería venir a compartir con todos ellos los logros obtenidos y agradecerles su respaldo y apoyo incondicional”, dijo el capitán.
El zaguero de 28 años amplió: “Para mí es como un gran aliciente emocional poder disfrutar de mi gente y mis amigos las veces que tengo la oportunidad ya que tengo un calendario muy apretado todo el año y no puedo venir a menudo a mi pueblo”.
CALOR FAMILIAR. Señaló que en la cabaña La Gloria se siente feliz y en paz con la gente que más quiere. “La vida de futbolista es muy sacrificada y exigente en todos los ámbitos, por eso cuando existen oportunidades como las que me tocan ahora, aprovecho para estar con la familia y los amigos”, señaló.
“Gracias a los trabajos realizados en los últimos meses, este lugar se ha convertido en un verdadero oasis donde tengo paz y tranquilidad para recargar pilas y volver al Brasil”, dijo sentado alrededor de una mesa rústica.
DAR TRABAJO A LA GENTE. Señaló que está invirtiendo en la ganadería. “La idea es invertir lo que genera el fútbol con el objetivo de dar trabajo a la gente y obtener rentabilidad”, dijo.
“El fútbol profesional es muy exigente y mete mucha presión para el jugador, además da muy poco tiempo de descanso por la competencia intensa que hay todo el año, por eso uno trata de descansar y disfrutar al máximo de su familia y sus amigos”, dijo.
NO OLVIDA EL INICIO. Gómez Portillo se inició el 31 de julio en San Ignacio, de manos del ex futbolista Carlos Guirland y del dirigente Agustín Chaparro. Compartió un partido de fútbol con sus amigos del barrio.
“Para mí fue una gran experiencia jugar en Milan donde coincidí con otros grandes defensores, por lo que no tuve continuidad, pero no me arrepiento y me sirvió mucho”, acotó. De Europa llegó a Palmeiras. “Yo quería salir de Milan y estaba por ir a otro club de media tabla en Italia, pero surgió lo de Palmeiras y ahora estoy disfrutando de mi segundo título de Libertadores con el Palmeiras’’.
Es candidato a Rey de América
Tras la conquista de la Copa Libertadores, Gustavo Gómez figura entre los candidatos al título de Rey de América, que otorga el diario El País de Montevideo, Uruguay.
Según publicó este martes el medio organizador, el paraguayo figura entre los 10 más votados por los periodistas, donde también aparecen Weverton, Raphael Veiga, Hulk, Julián Álvarez, Gabriel Barbosa, Giorgian De Arrascaeta, Bruno Henrique y Nacho Fernández.
La votación seguirá hasta el 27 de diciembre y el ganador del premio se dará a conocer el último día del 2021.
El tradicional premio que se entrega de forma ininterrumpida desde 1986, lo ganaron cinco paraguayos: Julio César Romero, Raúl Amarilla, José Luis Chilavert, José Cardozo y Salvador Cabañas.