El ruso Daniil Medvedev y el griego Stefanos Tsitsipas no superaron este lunes los octavos de final de Roland Garros, batidos respectivamente por el croata Marin Cilic y el joven danés Holger Rune, de 19 años y que no había ganado antes un partido en un Grand Slam, en una jornada en la que la polaca Iga Swiatek demostró que es humana y cedió su primer set este año en París.
MarinCilic, actual número 23 del ránking y campeón del US Open en 2018, derrotó por la vía rápida, en tres sets y sólo una hora y 45 minutos, a Medvedev, número 2 del mundo y segundo favorito, por 6-2, 6-3 y 6-2.
El ruso, que en 2021 alcanzó los cuartos de final en la primera vez que ganaba algún partido sobre la tierra parisiense, aún no está en plena forma tras operarse hace una semanas de una hernia discal.
Cilic se enfrentará en cuartos contra otro ruso, Andrey Rublev, pupilo del entrenador español Fernando Vicente. Será la segunda presencia entre los ocho mejores para Rublev, de 24 años, séptimo favorito y que se benefició de la retirada del italiano Yannik Sinner, undécimo, que había ganado la primera manga y cedido la segunda cuando sintió problemas físicos que le impidieron continuar, 1-6, 6-4 y 2-0 tras una hora y 23 minutos de juego.
Stefanos Tsitsipas, tercera raqueta del mundo, era el mayor peso pesado de su parte del cuadro, el único que había alcanzado la final, algo que hizo en la pasada campaña, por lo que la edición de 2022 del Grand Slam de tierra batida tendrá, al menos, un finalista inédito.
El heleno venía jugando con fuego y al final se quemó. El griego había remontado dos sets en contra frente al italiano Lorenzo Musetti en su debut en esta edición y tuvo que disputar cuatro contra el checo Zdenek Kolar en el segundo, pero ante el joven Rune ya no tuvo tiempo de reacción y cayó por 7-5, 3-6, 6-3 y 6-4.
Un fracaso para un tenista que llegaba con grandes aspiraciones, tras su victoria en Montecarlo y su final en Roma y que había visto como los principales candidatos al título, el serbio Novak Djokovic y los españoles Rafael Nadal y Carlos Alcaraz figuraban en la otra parte del cuadro, por lo que no los cruzaría hasta la final.
Pero apareció el talento de Rune, una potencia al alza que se convirtió en el primer danés clasificado para cuartos en Roland Garros y el primero en hacerlo en un Grand Slam desde Jan Leschly en el Abierto de Estados Unidos de 1967.
Su rival será el noruego Casper Ruud, verdugo del polaco Hubert Hurkacz, 6-2, 6-3, 3-6 y 6-3, para convertirse también en el primer tenista de su nacionalidad que alcanza esa ronda en París.
La clasificación de Rune entre los ocho mejores se suma a la del español Carlos Alcaraz, también de 19 años, por lo que Roland Garros contará en esa ronda con dos menores de 20 años por primera vez desde 1994.
En el cuadro femenino Swiatek sumó su triunfo 32 en una serie que parece inacabable, pero que la china Qinwen Zheng, 74 del mundo, amenazó con romper, antes de que problemas físicos en su pierna derecha detuvieran su progresión.
La tenista de 19 años, entrenada en Barcelona por el español Pere Riba Madrid, arrebató a la número 1 del mundo el primer set en los últimos 9 partidos, pero ahí se resintió de un problema en la pierna y su ritmo bajó de forma importante, dejando vía libre a la ganadora de 2020.
Su rival será la estadounidense Jessica Pegula, undécima favorita, que a sus 28 años jugará sus primeros cuartos en París, tras haber disputado dos ediciones en el Abierto de Australia.
La rusa Veronika Kudermetova, de 25 años, se clasificó para cuartos por primera vez en su carrera en un grande tras derrotar a la estadounidense Madison Keys, 1-6, 6-3 y 6-1.
Su rival será su compatriota Daria Kasatkina, 20 del mundo, también de 25 años, que ya alcanzó esa ronda en 2018 y que derrotó en octavos a la italiana Camila Giorgi, 6-2 y 6-2.