Se dice que jugar para el Sportivo Luqueño es igual a mucha presión por parte de su hinchada. Y esto de ahora en más para el entrenador Pablo Caballero no será solo un dicho ya que lo sintió por primera vez en la tarde de este domingo cuando su equipo enfrentó con victoria a Tacuary.
“Ayer (domingo) sentí por primera vez la presión de jugar en Luque de local y es realmente grande”, expresó el DT, quien asumió la difícil misión de dirigir al auriazul, tras una temporada poco feliz en Guaraní.
Sobre este tema expresó, dirigiéndose a la afición de la conocida como ciudad de la música: “Ojalá que ellos entiendan que somos seres humanos, primero, y que los futbolistas están noventa minutos en la cancha, no son máquinas”.
La hinchada juega un papel fundamental en el equipo ya que inyecta trabaja en el aspecto anímico, por lo que Caballero cree que “si eso se convierte en apoyo y no en presión, sería algo impresionante” lo que provocaría en el elenco.
SUMAMOS. “Hemos sumado no solo en puntos, sino lo de la presión y demostramos que si somos un equipo unido podemos lograr grandes cosas”, comentó a la 970 AM sobre la victoria del domingo.
SALVAR EL PROMEDIO. Tras los resultados, los aficionados del auriazul se ilusionan con repetir la historia del Apertura 2007 y alzarse con la Copa del presente Clausura. Sin embargo, el adiestrador fue claro: “En este torneo el objetivo es sumar puntos para dejar atrás el problema del promedio. La gente se ilusiona, pero el hoy es salir del problema del promedio”, cerró.