Un 0-0 fue el resultado que Sol de América consiguió de local frente a la Universidad Católica, en el juego de ida de la segunda fase de la Copa Sudamericana 2020. El marcador parece negativo, pero ante un rival dominador, se destaca haber mantenido el cero en el arco y tener la serie abierta buscando dar el golpe de visitante.
EL PARTIDO. La visita fue superior de arranque. El conjunto chileno tuvo el balón, las mejores opciones de ataque, pero se encontró con un seguro Rubén Escobar que con importantes tapadas se hizo vital para sostener la paridad en el Luis Alfonso Giagni.
Los Danzarínes se animaron tímidamente a atacar pasados los 25 minutos, pero mostrando muchas limitaciones. Ante esta situación, la pelota parada fue la vía más cercana que tuvo que el equipo de Sergio Órteman para generar peligro frente a la portería transandina.
En el inicio del complemento, el local intentó con empuje llevar peligro hasta el área rival, pero la intención se fue apagando con los minutos, volviendo al libreto donde el dominio del encuentro pertenecía a la visita.
Sobre los 62 minutos, Escobar volvió a ser el salvador del equipo al ganarle el mano a mano a Gastón Lezcano tras un grave error y pérdida de balón en la última línea de Sol de América. Fue la acción más clara del partido.
A partir de ahí se vio en Sol un equipo partido, sin ataque y sufriendo en cada incursión del conjunto trasandino. En ese momento, nuevamente Rubén Escobar puso las manos para atajar al equipo danzarín.
Al final, el compromiso se cerró con el cero en el marcador dejando todo para la revancha que será en una semana en Santiago de Chile.