Lo hizo, además, a “lo Messi": recorriendo con el balón el borde del área rival de derecha a izquierda, para evitar a cuantos defensas le cerraban el disparo, y lanzar un ‘zurdazo’ que se coló por la escuadra del meta australiano.
Se llevaba tan sólo un minuto y diecinueve segundos del partido, que se disputa en el estadio de los Trabajadores de Pekín. El gol más rápido de su extensa y exitosa carrera deportiva, pues el anterior ‘más veloz’ databa, con la elástica azulgrana, del duelo Barcelona-Chelsea, en 2018, cuando marcó a los dos minutos y siete segundos.
Con la camiseta argentina, el gol más rápido de Messi databa del Mundial de Brasil 2014, ante Nigeria, a los dos minutos y veintiseis segundos. EFE