Matías Fracchia fue el protagonista de esta historia tras anotar de tiro libre a los 54 minutos un disparo que fue imposible de dominar para el guardameta del Wanderers Mauro Silveira.
El Danubio desplegó su ofensiva desde el primer minuto con un remate de Manuel Monzeglio que pasó rozando el travesaño del arquero Silveira que ya anunciaba las intenciones del equipo de “la franja”.
El primer disparo a puerta del Wanderers llegó en el minuto 22 tras un tiro libre cobrado por Leandro Otormín que pasó por encima de la barrera de defensa y que pudo controlar con facilidad el portero Mauro Goicoechea.
Otormín insistió en el minuto 34 cuando disparó de pierna derecha un potente pelotazo que logró controlar nuevamente Goicoechea.
El árbitro paraguayo Benítez pitó el final del primer tiempo que estuvo marcado por la velocidad y ritmo por ambos bandos más no de eficacia en la definición.
A los 54 minutos Fracchia disparó un misil de tiro libre desde fuera del área rival para quemar las redes del Wanderers y poner la ventaja para el Danubio que salió con el firme objetivo de llevarse el encuentro.
Tras el gol, el entrenador del Wanderers, Alejandro Cappuccio, movió sus piezas para reforzar el ataque con la entrada de los jugadores José Alberti, Facundo Milán y Agustín Albarracín, quienes no pudieron cumplir con las aspiraciones del técnico.
Con el resultado en el bolsillo, el Danubio, que dirige Mario Saralegui, apostó por cerrar filas en la defensa con la entrada de Santiago Etchebarne por el experimentado delantero Sebastián Fernández.
Pese al resultado adverso, el Wanderers dio señales de buscar el empate con la generación de tiros de esquinas y a puerta que fueron infructuosos ante una defensa del Danubio que no registró errores.
Tras este resultado, el Danubio se convierte en el primer represente uruguayo en avanzar a la instancia de grupos, mientras que este jueves el Racing se medirá con Cerro largo, también de Uruguay, con las aspiraciones de obtener el segundo boleto y avanzar. EFE