Es un verdadero golazo, una gran respuesta para tan terrible desacierto de programar partidos tan tarde en un país donde los servicios de transporte público, con suerte, trabajan hasta las 21.00 y no todos tienen la posibilidad de llegar al estadio con movilidad propia.
Se entiende que por el excesivo calor se tengan que programar encuentros más tarde, pero… ¿es acaso el único horario disponible? ¿Alguna vez consideraron que los partidos se pueden disputar también en horario diurno?
Parece que los directivos están conformes con lo que reciben por los derechos de televisión y que ni siquiera les preocupa si el estadio estará semivacío o vacío cuando se dispute su partido. Digo, es lo que se denota ya que desde hace años venimos viendo esta realidad y nadie se animó a sugerir una solución.
En el 2018 me tocó ver de cerca lo complicado que es para un socio asistir a los partidos de su equipo: los días elegidos, los horarios en los que eran programados los lances, la distancia para llegar al estadio, a pesar de ser apenas 15 kilómetros, a lo sumo, permitieron a esta persona asistir a cuatro encuentros en toda la temporada.
Por todo lo expuesto, celebramos que los hinchas ideen estrategias para sortear estos problemas y ojalá que las gradas estén a tope este viernes para que los dirigentes del fútbol tomen nota de que hay que hacer algo más para cuidar el fútbol.