06 may. 2025

Países Bajos y España dejan todo para la revancha

Países Bajos y España animaron un partidazo que finalizó igualado en dos con varios condimentos para la revancha.

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España y Países Bajos empataron 2-2 y dejan todo para la revancha.

Hay países donde los partidos se complican y se generan dinámicas negativas imposibles de romperse. España la tiene en los Países Bajos donde nunca ganó y donde se encaminaba hacia su quinta derrota, cuando en el minuto 93, un jugador que va camino de convertirse en especialista en goles salvadores, Mikel Merino, dio un empate que sabe a gloria antes de Mestalla.

La racha de 21 partidos oficiales sin perder, que dejó la conquista de la Liga de Naciones y la Eurocopa, pasó por una dosis alta de sufrimiento para aumentar a 22. España se vio en el alambre en ‘De Kuyp’ y esquivó la derrota hasta en un partido de dificultad en el que se alejó de su imagen ganadora.

Un buen arranque precedió una relajación que habitualmente se paga en duelos grandes. España, rival a batir por todos por su condición de campeona de Europa, infundió respeto de inicio pero lo perdió cuando reculó ante el empuje de Países Bajos. Mostró el bloque de Luis de la Fuente lagunas defensivas, dudas, desajustes que le costaron caros cuando sintió que un tanto tempranero ya era un botín teniendo la vuelta en tres días en Mestalla.

El inicio de autoridad, con Pedri al mando apareciendo en cualquier zona de ataque, probando de zurda con poco ángulo la fiabilidad de Verbruggen nada más arrancar el duelo. A Países Bajos no le intimidaba la propuesta española. La esperaba. Optaba por responder con las mismas armas con el objetivo de atacar más, ser más directo y morder arriba para alejar de la zona de peligro el talento español.

Cometió un error que le costó caro. A los 9 minutos en el inicio de jugada. Un mal control de Hato que se hizo pequeño ante la presión de Lamine Yamal. El robo limpio, el amago en carrera, la conexión con Pedri y la visión en el pase al movimiento dentro del área de Nico Williams. Un medio giro y zurdazo centrado a la red.

España mostraba credenciales de campeón pero Países Bajos ya había avisado con un disparo de Gakpo, alto. Koeman apuntó al flanco de Pedro Porro, con poca ayuda defensiva de Lamine Yamal y se comenzaron a ver síntomas de sufrimiento, especialmente con el despertar de Frimpong que dio la noche a Cucurella.

Antes de un duro capítulo defensivo, lo cierto es que ‘Cucu’ generó una acción que pudo ser el segundo. El buen centro en su subida por banda izquierda lo remató cerca del poste Morata, buscando el contrapié del portero. Su único remate en un encuentro con poca participación.

Las bajas de Laporte y Vivian ya presentaban un centro de la defensa español con lo justo. El regreso de Le Normand con galones junto a Cubarsí, a quien un golpe en el tobillo mermaba. Países Bajos ya era el dueño del partido. Van Dijk avisaba rematando arriba un balón muerto tras rechaces y Gakpo no perdonaba. Disparo seco sin estar encimado. Con Porro llegando tarde y recriminando a Lamine su falta de agresividad en la acción.

Hacía tiempo, posiblemente desde la segunda parte ante Alemania en la Eurocopa, que España no sufría tanto en un partido. Obligada a replegarse, sin un líder que pidiese el balón y anestesiase el encuentro. Exigido por bandas sin respuesta. Sin balón. La verticalidad de Países Bajos instalaba la duda. La movilidad de Memphis Depay, la velocidad de Frimpong.

En el día más impreciso de Yamal como internacional aún pudo inventar un pase que enganchó de zurda Zubimendi a las manos de Verbruggen. Era un espejismo en un partido que iba tiñéndose de naranja. Unai Simón, el día de su regreso, sacaba un disparo de Memphis que aparecía en el espacio entre Cucurella y Cubarsí que ya no podía más. Su lesión cambió los planes.

Con Asencio en la grada debutó Huijsen. Bajo un foco de máxima tensión. Con 19 años, silbado desde que pisó el césped por renunciar a su país de nacimiento y decidir jugar con el país del que se siente, España. El examen era mayúsculo con el rival lanzado. Gakpo, hiperactivo, enganchaba un testarazo que detenía Unai. El travesaño evitaba un golazo de volea de Reijnders, desde la frontal, a pase de Frimpong que era el dueño del partido.

El descanso que pedía a gritos España no cambió nada. Las consignas de De la Fuente sirvieron de poco porque el segundo acto no pudo comenzar peor. No se había cumplido el primer minuto cuando de nuevo Frimpong imponía su velocidad ante Cucurella, la ponía atrás y en esta ocasión Reijnders ajustaba su disparo al poste llegando desde atrás. Imposible para Unai.

Países Bajos ya había cumplido su objetivo de forma merecida. Era el momento de dar un paso al frente y reaccionar. Y lo hizo España en cuanto recuperó la posesión. Sin su finura habitual pero con personalidad. No había margen para más despistes porque Gakpo era una amenaza continua. De nuevo probaba a Unai con un disparo desde la frontal.

Pero la intensidad del equipo de Koeman ya no era la misma y De la Fuente daba uno de esos golpes de entrenador que provocan el elogio en caso de buen resultado y crítica en la derrota. Quitó del campo a Yamal, a quien es bueno mantener hasta el último suspiro por su capacidad para inventar una acción decisiva. Su falta de implicación defensiva le pasó factura. También fuera Pedri y Morata. Tres líderes. Dani Olmo, Oyarzabal y Ayoze eran los encargados de cambiar la cara a la selección.

Lo consiguieron porque Países Bajos se fue encerrando y la recta final cambió por una entrada desmedida de Hato al tobillo de Le Normand a los 81 minutos. Con un jugador más apretó España, probó a Verbruggen con disparos de Zubimendi, Ayoze, Nico y Huijsen, y cuando el partido moría llegó el momento de Mikel Merino.

El futbolista que pasó a la historia por el testarazo en la segunda parte de la prórroga ante Alemania que tumbaba la maldición del anfitrión que sufría España en la Eurocopa. Nico Williams desbordaba, chutaba y el bote provocaba el rechace del portero para que Merino, en la zona del 9 en la que está jugando en el Arsenal, mandase el balón a la red para que la eliminatoria se decida el domingo en Mestalla.

. Ficha técnica:

2 - Países Bajos: Verbruggen; Geertruida, Van Hecke, Van Dijk, Hato; Reijnders (Wieffer, m.91), De Jong (Koopmeiners, m.73), Kluivert Xavi Simon, m.73); Frimpong, Memphis Depay (De Ligt, m.84) y Gakpo.

1 - España: Unai Simón; Pedro Porro, Le Normand, Cubarsí (Huijsen, m.41), Cucurella; Zubimendi, Fabián (Mikel Merino, m.84), Pedri (Dani Olmo, m.66); Lamine Yamal (Oyarzabal, m.66), Nico Williams y Morata (Ayoze, m.66).

Goles: 0-1, m.9: Nico Williams. 1-1, m.28: Gakpo. 2-1, m.46: Reijnders. 2-2, m.93: Mikel Merino.

Árbitro: Glenn Nyberg (Suecia). Mostrá cartulina amarilla a Gakpo (45+1) y Van Dijk (79) por Países Bajos; y a Huijsen (61) y Ayoze (72) por España. Expulsó por roja directa a Hato a los 81 minutos.

Incidencias: encuentro de ida de los cuartos de final de la Liga de Naciones, disputado en ‘De Kuyp’, lleno, con 51.177 espectadores en la grada. EFE

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