17 feb. 2025

El Liverpool no falla y pasa a octavos como primero de grupo

El Liverpool, vigente campeón, no falló y certificó su clasificación para los octavos de final de la Champions League como líder del grupo E, tras imponerse este martes por 0-2 en su visita al Salzburgo en un frenético encuentro en el que los de Jürgen Klopp impusieron su contundencia en las dos áreas.

a464c779bd3577b7af20524fe8d7a0cc36373f66.jpg

Jugadores del Liverpool celebran la anotación de un gol.

Si el conjunto inglés es “rock and roll”, el Salzburgo del estadounidense Jesse Marsch es puro “speed metal”, como se encargó de demostrar el conjunto austríaco con una impetuosa puesta en escena que le permitió firmar dos peligrosas aproximaciones antes de cumplirse los tres primeros minutos de juego.

Pero si el Salzburgo apostó por el vértigo, no rehuyó el duelo el Liverpool, que, con su habitual intensidad, pudo inaugurar a los cuatro minutos de juego el tanteador con un remate del egipcio Mohamed Salah, que ganó la partida a su marcador tras un pase en largo del central croata Dejan Lovren.

El centro del campo no tardó en convertirse en un mero lugar de paso para las constantes acometidas de ambos equipos, que buscaron llegar una y otra vez al área en el menor tiempo posible.

El hábitat en el que mejor se mueve el Liverpool y, sobre todo, el tridente que forman el egipcio Salah, el brasileño Roberto Firmino y el senegalés Sadio Mané.

Los atacantes del conjunto inglés se sienten como pez en el agua moviéndose a la máxima velocidad, pero no les tienen nada que envidiar el surcoreano Hee-Chan Hwang, el noruego Erling Haaland y el japonés Takumi Minamino.

Lo demostraron a los siete minutos en una eléctrica combinación entre el japonés, que sorprendió a los defensas con un espectacular taconazo, y el surcoreano, al que sólo le privó del gol una espectacular mano del portero brasileño del Liverpool Alisson.

Una ocasión a la que se encargó de responder segundos más tarde por parte del Liverpool el senegalés Sadio Mané con un disparo que puso a prueba los reflejos del portero local Cican Stankovic.

Ocasiones y más ocasiones que quedaron reflejadas en la estadística, que registró que entre los dos equipos -seis por parte del Salzburgo y cinco por la del Liverpool- habían disparado en once ocasiones en los primeros veinticinco minutos de juego.

Reflejo de la ambición e intensidad de dos de los equipos más atractivos, por no decir, los más divertidos de la competición.

De hecho, las ocasiones no dejaron de sucederse, pero Alisson y Stankovic se encargaron de impedir con sus intervenciones que ni Salzburgo ni Liverpool pudieran marcar.

Especialmente inspirado se mostró el guardameta del Salzburgo, que si en la prolongación del primer tiempo evitó un gol del guineano Naby Keita, en el arranque del segundo frustró las esperanzas de Salah, al arrebatar el balón de los pies al egipcio en un mano a mano en el interior del área.

No pudo hacer, sin embargo, nada Cican Stankovic por evitar el gol de Keita, que firmó a los 57 minutos el 0-1 al rematar de cabeza un centro de Mané, que no desaprovechó un espectacular pase del lateral Trent Alexander-Arnold de banda a banda para internarse en el área del Salzburgo.

Un golpe que pareció aturdir al conjunto local, que un minuto más tarde quedó completamente ‘k.o.’ con el segundo tanto del Liverpool, obra de Mohamed Salah, que se resarció de sus fallos anteriores con una magnífica definición.

Casi sin ángulo y tras sortear al portero local, el egipcio, que se había encargado de propiciar el fallo del defensa camerunés Jerome Onguéné con una atosigante presión, estableció el 0-2 con un sutil remate con la derecha, su pierna menos buena.

Dos goles que acabaron con cualquier posibilidad de clasificación del Salzburgo, que se estrelló ante la solidez y, sobre todo, la pegada de un Liverpool, vigente campeón, que demostró que sigue conservando suficiente “rock and roll” en sus venas para tratar de retener el trono que conquistó el pasado año en Madrid.

Embed

Más contenido de esta sección
Una aparición de Fabián Ruiz en la segunda parte bastó para despertar al París Saint-Germain, que doblegó 0-1 al Toulouse (0-1) en un duelo tedioso que sirvió al equipo de Luis Enrique para continuar fuerte en el liderato de la Ligue 1.
El Milan espantó la sorpresa este sábado en San Siro al derribar el muro del Hellas Verona (1-0) gracias a la asistencia del luso Rafael Leao y el tanto de mexicano Santiago Giménez en los compases finales de un duelo muy complicado que acerca a los ‘rossoneri’ a los puestos europeos.
La resurrección del pulso por el título estuvo en las manos del Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, que acabó el partido arrodillado en la zona técnica llevándose las manos a la cara, incrédulo ante las ocasiones perdonadas por su equipo, incapaz de tumbar a un Bayern Múnich rácano, salvado por los palos y Manuel Neuer, que ni siquiera chutó a portería rival.
El Napoli topó este sábado por tercera vez esta temporada con el Lazio (2-2), en un partido en el que primero remontó pero en el que dejó escapar en los últimos minutos, dejando el liderato en el aire; en una jornada clave con el enfrentamiento entre el Juventus Turín e Inter de Milán.
Osasuna rascó un empate ante el Real Madrid (1-1), que se dejó dos puntos en Pamplona en una tarde marcada por la polémica expulsión de Jude Bellingham en la primera mitad y el penal sobre Budimir tras pisotón de Camavinga tras el paso por vestuarios que supuso el gol local.
Se encienden las alarmas en la Albirroja: Julio Enciso se retiró lesionado y con lágrimas en los ojos en la Premier League.