Será la undécima final para el campeón español en sus doce participaciones, ya que en 2015 cayó ante Novak Djokovic en semifinales, siendo el único jugador que puede vanagloriarse de haber ganado a Nadal en este torneo.
Nadal comenzó marcando territorio con un 3-0 que no reflejó la igualdad de los juegos iniciales y en los que el manacorense impuso con claridad su servicio.
No tardó, sin embargo, Grigor Dimitrov en devolverle la moneda pues tras romper el servicio del español en el quinto juego, igualó la contienda (3-3) en el siguiente.
El campeón español dominó con solvencia sus saques, mientras que el búlgaro sufrió en todos y tuvo que superar una bola de rotura en el sexto juego y dos en el octavo, aunque mantuvo la paridad en el marcador hasta el final.
Con 5-4 y saque para Dimitrov, el diez veces campeón de Montecarlo se dispuso a sentenciar el set por la vía rápida y con un 15-40, justo cuando se cumplió una hora de partido, desaprovechó la primera bola de set, pero no la segunda para apuntarse el 6-4.
Nadal volvió a sacar primero en la segunda manga y volvió a repetir con el 1-0, con el 2-0, en blanco con saque del búlgaro, y con el 3-0.
La desesperación y frustración de Dimitrov, cuarto favorito del torneo y quinto de la clasificación mundial, fue en aumento al ver que todos sus intentos por frenar a Nadal eran baldíos. Y así el cuarto juego fue también para el español y de nuevo en blanco sobre servicio del búlgaro.
A la tercera fue la vencida y Dimitrov en su tercer servicio del segundo set consiguió inaugurar su marcador, aunque dando malas sensaciones, tanto por quejarse del hombro como por la efectividad de sus golpes.
El español cerró la semifinal a lo grande, con un juego en blanco, para alcanzar su undécima final. Las otras diez las ganó. El vencedor del duelo entre el alemán Alexander Zverev, tercer favorito, y el japonés Kei Nishikori será su rival. EFE